Fernando Ruiz3 min lecturaSi preguntan a cualquier sevillista que se encuentren por la calle por el origen de la época dorada del a, todo le responderán el mismo momento: el gol de Antonio Puerta ante el Schalke 04. Aquel zurdazo en la prórroga del partido de vuelta de las semifinales de la Copa de la UEFA de 2006 lo puede narrar cada sevillista como si hubiera ocurrido anoche mismo. Incluso la jugada entera, desde que Jesús Navas recibe el balón en la banda derecha, pone el centro a media altura que se pasea por la frontal del área y el entonces '27' del Sevilla empalaba con su 'zurda de diamantes' para llevar al Sevilla a su primera final europea con una parábola perfecta.
De aquello se cumplirá la próxima semana 17 años pero el recuerdo de aquel y del propio Antonio Puerta sigue muy vivo en la afición del Sevilla, porque ella misma se encarga de recordarlo en cada minuto 16 de partido en el Ramón Sánchez-Pizjuán, para que lo honren tanto los que lo vieron por la banda izquierda de Nervión como aquellos más jóvenes que entonces eran unos críos o los que nacieron después de aquello.
Por eso, el momento que se vivió ayer, no en el partido, sino antes, en la previa, dice mucho de la afición del Sevilla. Todo ocurrió apenas a tres calles de distancia del Ramón Sánchez-Pizjuán, donde Antonio Puerta creció dando patadas al balón cada tarde hasta llegar al primer equipo del Sevilla Fútbol Club. Allí viven todavía los padres del malogrado futbolista nervionense, donde esa calle ahora lleva el nombre de su hijo. Allí se concentraron cientos de sevillistas en las horas previas del partido para ir calentando motores.
El padre de Antonio Puerta no dudo asomarse a la ventana para contemplar dicha escena y todos los allí presentes lo vieron y no dudaron cantarle en homenaje a su hijo con la letra de unas de los cánticos más famosos de la grada de Gol Norte: "Él era un miembro de los Biris Norte. Desde chico iba a la bombonera, pero la vida se lo llevó al cielo, tercer anillo de la bombonera, vamos Sevilla estamos contigo, tu sevillismo ha creado escuela y para honrar la muerte de mi amigo ahora todo el estadio es una caldera".
El momento fue captado por el periodista Andy Leal Cerdá (@andyllc) y lo compartió en sus redes sociales. El padre de Antonio Puerta rompió en aplausos para dejar paso a las lágrimas, visiblemente emocionado, mientras todos coreaban el nombre de Antonio Puerta y su padre agradecía el gesto de todos los sevillistas.