Álvaro Palomo4 min lecturaOussama Idrissi aterrizó Nervión en el verano de 2020 con la esperanza de que dotara de profundidad y velocidad el flanco izquierdo del ataque sevillista después del fiasco de Rony Lopes, pero, a partir de ahí, comenzó un calvario para el extremo neerlandés que ha llegado a su fin ahora en México.
Y es que Idrissi no le encajó desde el primer momento a Julen Lopetegui y en enero ya hizo las maletas para marcharse cedido al Ajax con el fin de disfrutar de protagonismo. Al acabar el préstamo regresó al Sánchez Pizjuán con ganas de convencer al técnico, pero tampoco cuajó y de nuevo en el mercado invernal se le buscó una salida, esta vez en el Cádiz, donde tampoco logró despuntar aunque dejó buenas sensaciones en varios partidos.
En el Sevilla le cerraron la puerta a nueva oportunidad y, tras su etapa como amarillo, directamente lo cedieron en el periodo estival al Feyenoord, club en el que, pese a las lesiones, marcó cinco goles y sirvió seis asistencias en un total de 2.000 minutos. Tampoco le valió para intentar ganarse un sitio en el Sevilla y el pasado verano se desvinculó finalmente, si bien hasta septiembre no halló un nuevo destino, apostando por salir de Europa para relanzar su carrera en México.
Así, el neerlandés aterrizó en el Pachuca con la ilusión de, a sus 27 años, disfrutar del nuevo del fútbol, pero la realidad es que sus comienzos en tierra azteca invitaban a pensar que sufriría una nueva pesadilla. Y es que al extremo, pese a ser recibido como una estrella, le costó entrar en los planes del equipo en el Torneo de Apertura, pues en los dos primeros partidos no fue convocado y en los tres siguientes partió como suplente.
Se avecinaba nuevo fiasco, pero Idrissi supo darle la vuelta a la situación y poco después empezó a adquirir protagonismo, con gol en su primera titularidad ante el Juárez y una asistencia ante el Tijuana en el último partido del campeonato.
No obstante, ha sido en el Torneo Clausura cuando realmente Idrissi ha empezado a colmar las expectativas suscitadas por su fichaje, con registros que lo acercan a lo que fue cuando despuntó en el AZ Alkmaar y llamó la atención del Sevilla. No en vano, hasta ahora se han disputado cuatro choques de la liga y en los tres últimos ha contribuido hasta en cuatro goles de Pachuca, con una diana y tres asistencias. Así, asistió contra Pumas, lo volvió a hacer contra el Atlas y en el choque del domingo contra el Tijuana participó en el triunfo por 3-2 con un tanto y un pase de gol, siendo nombrad el mejo jugador del choque, reflejo de que ha encontrado su sitio tras salir de Nervión.
