Vuelve Sergio Ramos y lo hace con la intención de volver a erigirse como el líder de la defensa del Sevilla FC. El camero se perdió el duelo del pasado lunes ante el Rayo Vallecano por sanción y lo cierto es que el conjunto sevillista estuvo solvente en tareas defensivas. Pero su jerarquía no pasa desapercibida y estará este domingo en el Ramón Sánchez-Pizjuán para medirse a una de sus víctimas favoritas, el Atlético de Madrid. Tercer episodio en un corto espacio de tiempo con rencillas pendientes y un pasado que amarga a la afición colchonera. Duelo enérgico donde el central aportará su valía y determinación.
Con la nueva lesión de Marcao (una más en su maltrecho historial), Quique Sánchez Flores recupera a Sergio Ramos después de la importante victoria en Vallecas (1-2). El 4-4-2 le sienta mejor el Sevilla. Una mejoría cimentada en defensa, pero también en la nueva asociación llena de acción que se ha encontrado arriba. La dupla Isaac Romero - Youssef En-Nesyri ya trabaja a favor de viento y el técnico respira aliviado con esta explosión.
Sin nada se tuerce a última hora, Sergio Ramos formará pareja de centrales con Loic Badé. Ambos deberán frenar a los Griezmann, Morata y compañía. Y los recientes enfrentamientos entre Atlético y Sevilla dejan ascuas que pueden aparecer este domingo en el Ramón Sánchez-Pizjuán. La afición de Nervión ya aguarda impaciente uno de esos grandes partidos de la temporada.
Si hay un enemigo público por antonomasia en el Atlético de Madrid ese es Sergio Ramos. Su pasado madridista hundió a los colchoneros donde más duele. Les arrebató hasta dos Champions de manera cruel. Hay atléticos que aún tienen pesadillas con aquel cabezazo en Lisboa. Y ese es un factor que ahora juega a favor del Sevilla. Un 'flashback' que seguro está presente en la cabeza de Simeone.
Sergio Ramos se ha enfrentado 47 ocasiones contra el Atlético de Madrid desde que es profesional. Su balance es de 24 triunfos, 11 derrotas y 12 empates. Dos de esos tropiezos han llegado esta campaña con el Sevilla, pero en suelo colchonero.
En el partido que se disputó a finales de diciembre ocurrió un hecho que la afición del Atleti no olvida. El de Camas pisó el escudo del oso y el madroño al saltar al campo y el público se puso de los nervios. Ya en el encuentro de Copa del Rey se vivieron momentos de tensión donde Ramos pudo anotar el tanto que hubiese sido el empate. Un choque donde los sevillistas fueron perjudicados por el árbitro y la actuación de Hernández Hernández en el VAR.
El destino ha querido que Ramos vuelva a verse las caras por tercera vez con su enemigo íntimo. Esta vez con su gente como paraguas y con la firme intención de volver a coronar y mandar en la línea de defensas del Sevilla FC.