Aitor Torvisco6 min lecturaNunca el mercado de fichajes de enero ha tenido tanta relevancia como el de este 2023. En primer lugar, en lo global, porque el parón de mes y medio por culpa del Mundial de Qatar hace que las negociaciones propias de época de mercado se abran en noviembre, en cuanto paren las competiciones no se hablará de otra cosa. Especial importancia en casos como el del Sevilla FC, sumido en una urgencia clasificatoria y en medio de un cambio de entrenador que necesitan de retoques intensivos. Aún más, si cabe, teniendo en cuenta que tanto el presidente, José Castro, como el director deportivo, Monchi, han reconocido en las últimas horas de manera sincera y explícita que el club "se ha equivocado" con la planificación. Y no sólo eso, sino que "se ha equivocado mucho" y que va a haber consecuencias, drásticas en algunos casos, y nombres importantes, como el de Ocampos.
Las primeras consecuencias las han pagado el propio Castro, acostumbrado ya a los gritos contra el palco en los partidos en casa, y con Monchi, criticado de manera hasta ahora nunca vista. Ellos ya han asumido que merecen ese enfado de la afición; pero ahora toca "hacer cosas". Como anunció Monchi en su rueda de prensa desde Mánchester, con la que puso fin a tres semanas de silencio autoimpuesto, hay una cita prevista entre cuerpo técnico, dirección deportiva y directiva después del partido de Copa del 14 de noviembre para consensuar las líneas de actuación en el mercado de enero. Eso sí, la hoja de ruta ya está trazada.
Por un lado, Sampaoli ha pedido refuerzos en todas las líneas y ha criticado la "herencia de Lopetegui" por lo difícil que le resulta resetear la mente de una plantilla hecha a unos automatismos asimilados en tres años y medio con el vasco. Sucede que las arcas del Sevilla FC no están para mucha fiesta, y menos después del prematuro KO en Champions. Habrá que ser 'imaginativo' -el eufemismo que se suele decir hoy día- en los fichajes y en las salidas.
En los fichajes, además de varios nombres que han sonado en distintos puestos, se buscarán oportunidades de mercado de jugadores que terminen contrato en junio de 2023 y habrá que mirar la forma de aprovechar mejor los recursos propios. En este sentido, el nombre de Lucas Ocampos está pintiparado, ya que lo que era una venta al Ajax con una plusvalía interesante se acabó convirtiendo en una cesión forzada el último día de mercado para no interferir en las llegadas ya activadas de Januzaj y Dolberg.
Sin embargo, la realidad es que Sampaoli se queja de que no tiene extremos para atacar al espacio porque sólo tiene a Lamela -y a Corona, pero está lesionado- y el resto (Suso, Isco, Januzaj o Papu) "son para jugar al pie". Para colmo, Ocampos lleva cinco partidos seguidos sin jugar ni un sólo minuto. Sólo suma 114 minutos en seis partidos entre Eridivisie (100' en 4 citas) y Champions (14' en dos). Es más, jugó más con Lopetegui (133' en tres encuentros) antes de irse al filo del cierre del mercado estival que de lo que lleva acumulado en el cuadro neerlandés.
Sampaoli, según avanza Samuel Silva en Relevo, ya ha dado el 'sí' a la vuelta de Ocampos, a quien considera útil y no entiende su salida. Todo lo contrario que pasa con otros que se quedaron y que no están rindiendo lo que deberían por capacidad y, sobre todo, por masa salarial ocupada. Y en ese sentido habrá toma de decisiones por parte del club en estos próximos meses.
Según ha avanzado Radio Marca, el Sevilla FC se plantea desde revisiones de contrato a la baja para aligerar masa salarial hasta incluso rescisiones amistosas de contratos de veteranos con fichas altas cuyo rendimiento no está a la altura. Hay una ficha libre, pero necesita salidas.
Ivan Rakitic, Jesús Navas o Fernando Reges, que además son tres de los capitanes, van a ser algunos de los nombres que estarán sobre la mesa. A otros, directamente, se les propondrá la salida. Thomas Delaney ya había abierto esa puerta por iniciativa propia y negocia con el Copenhague; pero tienen que salir más.
Castro dijo claramente que en enero el Sevilla "fichará a los jugadores que hacen falta y soltará a los que juegan menos". Monchi dijo algo similar: "Esta plantilla tiene más fútbol, rendimiento, repertorio técnico y táctico... seguro. No es plantilla para ser el dieciocho, eso seguro; pero se puede mejorar. Vamos a buscar soluciones en todo aquello que consideramos mejorable, aunque hay muchos factores que tenemos que meter en la coctelera". "Creo que la gente no tiene ganas de escucharnos, sino que tiene ganas de que hagamos cosas". Pues eso, a hacer cosas. A agitar la coctelera.