No es ningún secreto que el Sevilla rastrea el mercado para reforzar el próximo verano la delantera en previsión de que llegarán ofertas por En-Nesyri y que la situación ecónomica obliga a hacer caja. De hecho, en los últimos días ha surgido el vivo interés del Milan y del Al-Hilal saudí por hacerse con sus servicios.
Además, se espera que se produzcan las salidas Rafa Mir y Mariano, a la par que no existe opción de compra por Alejo Véliz, por lo que en Nervión se incorporará un mínimo de un delantero y no se descartan dos, ya a expensas de las despedidas que haya finalmente. Ante esta necesidad, ya empiezan a surgir nombres de arietes en la órbita nervionense, aunque muchos de ellos se deben poner en cuarentena.
Así las cosas, Víctor Orta, como ya informó ED, mantiene en el punto de mira en Robert Bozenik, que estuvo a un solo paso de firmar en enero, pero que, finalmente, se vio obligado a quedarse en el Boavista. Además, recientemente se ha encartado a Matviy Ponomarenko, ariete ucraniano de 18 años que destaca sobremanera en el filial del Dinamo Kiev, y que ya ha debutado en el primer equipo.
No obstante, el último nombre en aparecer ha sido el de Fotis Ioannidis, la sensación del fútbol griego por su aluvión de goles en las filas de Panathinaikos, donde ya suma 20 dianas y siete asistencias en 36 partidos, siendo el máximo realizador de origen heleno en la Super League 1, con 10 aciertos, que no el pichichi, lo que ostenta El Kaabi, con 15 dianas, seguido del exbético Loren, con 14.
Así, el periodista luso Bruno Andrade, especialista en mercado, asegura que el Sevilla se erige en uno de los equipos que le sigue la pista al delantero griego de 24 años, principal prioridad de Sporting Clube para sustituir en verano a su gran estrella, Gyokeres, pretendido por los grandes de Europa. Dicha fuente también apunta al Atalanta dentro de la lista de clubes interesados.
La realidad es que, a tenor de las indagaciones, la explosión anotadora ha despertado la atención de la dirección deportiva, que, como ocurre con otros tantos delanteros, se mantiene pendiente de su situación, sin que se haya producido ningún movimiento relevante a día de hoy aunque su nombre ya sonara tímidamente para enero.
Con contrato hasta 2027 con el Panathinaikos, Transfermarkt tasa al internacional con Grecia en 10 millones de euros, aunque, probablemente, su precio de salida sería mayor. De hecho, Andrade afirma que Panathinaikos exige 15 millones más cinco en variables, lo que no cuadraría en las cuentas nervionenses a menos que obtuviera pingües ingresos en el mercado estival.