Si ya durante el reconocimiento médico se metió en un pequeño entuerto al firmar un autógrafo sobre la franja roja de la camiseta de River Plate, un detalle nimio aquí pero prohibidísimo en Argentina, el debut oficial de Federico Gattoni, que había dejado buenas sensaciones durante los amistosos disputados en el parón de la Liga Profesional de Fútbol debido a la Copa América (revalidada en Estados Unidos por la Albiceleste), no pudo ser peor. Bueno, en realidad, sí, ya que Miguel Borja, autor de un doblete, salvó los muebles sobre la bocina para el 'Millonario', que perdía en el minuto 92 ante Lanús y habría encadenado dos derrotas, porque perdió 2-0 el pasado 13 de junio ante el Deportivo Riestra. El empate a dos sirve de poco al vigente campeón, séptimo en la clasificación tras la disputa de seis jornadas, con 10 puntos, a cuatro de Huracán y Unión Santa Fe.
El 1-2, por cierto, había venido precedido de un clamoroso y doble error del ex central de San Lorenzo, que, primero, se confía en el lateral del área ante Morgantini, que le robó la cartera para disparar a bocajarro y probar los reflejos de Conan Ledesma. Luego, tras otro lanzamiento bloqueado 'in extremis', un compañero de Gattoni despeja defectuosamente en corto para que el balón sea abierto a la banda derecha por parte de 'El Granate', mandando un centro al área Marcelino Moreno para que Jonathan Torres gane en el salto al todavía sevillista y cabecee picado al fondo de la red. Al menos, el gol a continuación de Borja redujo la influencia en el marcador del fallo prorrogado de Federico, que disputó el partido íntegro, formando pareja en el eje de la defensa del club de Núñez con el chileno Paulo Díaz, que tampoco estuvo especialmente afortunado.
Gattoni, que disputó la segunda parte de la 23/24 cedido en el Anderlecht belga, ha vuelto a ser prestado en la 24/25 a River Plate por parte del Sevilla FC, donde otro grave error en la primera jornada del curso pasado, que costó un gol y, a la postre, la derrota frente al Valencia CF, propició que José Luis Mendilibar le hiciera la cruz para siempre. Apenas acumula cuatro partidos como nervionense el zaguero, que llega ahora a un grande su país, que conserva una opción de compra ligeramente superior a los tres millones de euros para quedárselo en propiedad, lo que, pese a todo, daría a los de Eduardo Dato la posibilidad de obtener más del doble de lo invertido para llevarlo a Europa, donde, por ahora, ha fracasado estrepitosamente.