Álvaro Palomo4 min lecturaDías atrás, surgió la información de que el Sevilla, en su búsqueda de un delantero para potenciar su ataque en enero, ha puesto su punto de mira sobre Robert Bozenik, hasta el extremo de que, según Sky Sports, ya habría realizado una oferta al Boavista portugués para hacerse con sus servicios en el presente mercado.
Dicha fuente apunta que Víctor Orta ya habría movido ficha en una operación que rondaría los cinco millones de euros más pluses por objetivos y que también habría una propuesta sobre la mesa del Lille francés e interés del Werder Bremen.
Una operación que no resultaría para nada sencilla, pues existen numerosas aristas que complican la llegada del punta eslovaco al Ramón Sánchez-Pizjuán. La primera la aporta el propio Sevilla tanto en cuanto ahora mismo no dispone de ninguna ficha libre una vez que el Isaac Romero dio el salto oficial al primer equipo con el dorsal 20. Los nervionenses, para que exista alguna opción de incorporarlo, deberían hacerle hueco en los próximos días con alguna salida de la plantilla, lo que no se antoja sencillo, pues el elegido, Rafa Mir, se niega a tomar otro rumbo que no sea Mestalla.
El segundo problema se encuentra en la competencia, y no solo por la presencia del Lille y del Werder Bremen, sino también del Oporto, que ha preguntado por el internacional con Eslovaquia y que podría lanzarse a por él en el caso de que le encuentre acomodo al español Toni Martínez, con poca presencia en el presente curso. Los 'Dragones' le ofrecen a Bozenik cumplir un deseo que ahora mismo se encuentra al alcance de los hispalenses: disputar los octavos de final de la Champions League. Los lusos obtuvieron el pase para esta fase y se miden con el Arsenal.
Como señalan fuentes portuguesas, el Oporto no ha realizado todavía ninguna oferta ante las pretensiones iniciales del Boavista, pero se mantiene a la espera ante el hecho que Bozenik ve con buenos ojos esta posibilidad, aunque tampoco se cierra a dar el salto a un campeonato más importante como sería el español.
Otro gran obstáculo es que el Boavista se muestra reacio a dejar escapar a una de sus grandes joyas en este mercado, sobre todo por las trabas que le pone la FIFA al club para inscribir nuevos jugadores por un asunto de antiguas deudas. Solo estaría abierto a dejarle marcar, según apuntan en Portugal, por alrededor de unos diez millones de euros, cantidad a la que se podría llegar probablemente con objetivos.
En este sentido, el presidente del Boavista, Victor Murta, se encuentra en una encrucijada, pues el club necesitaría hacer caja para afrontar los sueldos de los futbolistas, aunque las dificultades para encontrar un sustituto le obliga a subir el precio de un ariete tasado por Transfermarkt en cinco millones de euros. Sea como fuera, lo primero, para que fuera viable la operación, el Sevilla debe liberar una ficha. Sin este paso, no hay margen alguno.