Con motivo de la final de la Copa del Rey que este sábado disputarán Real Madrid y Club Atlético Osasuna en el estadio de La Cartuja de Sevilla, 'El Chiringuito' ha trasladado su habitual plató al antepalco del recinto sevillano, donde ayer además de entrevistar al presidente de la RFEF, Luis Rubiales, también estuvieron presentes exfutbolistas como el bético Capi o el sevillista Diego Capel, quien precisamente fue protagonista en la final de Copa de 2010 que el Sevilla ganó al Atlético de Madrid siendo uno de los goles del almeriense.
Así recordaba su etapa en el Sevilla el canterano nervionense. "Me quedo con muchos momentos, la verdad que tuve la suerte de vivir una de las épocas más bonitas y doradas del club, con los primeros títulos además pude ser partícipe de ellos, en esa final de Copa en el Camp Nou donde pude marcar un gol y muy feliz. Para mí, el Sevilla es el equipo de mi vida, para un chaval de la casa como yo, que ha salido, llegar arriba y vivir toda esa etapa no tiene precio, no se puede pagar con nada", reconocía.
Ahora, tras el triunfo ante el Espanyol, Capel como muchos sevillistas, respiran más tranquilos al ver la permanencia casi atada: "Es difícil, he sufrido como todos los sevillistas, al final ver a un club que siempre ha estado luchando con los más grandes ahí abajo no está uno acostumbrado pero el Sevilla no hay que darlo nunca por muerto. Al final en esta última fase de la temporada ha tomado aire y esas clasificaciones en la Europa League le ha dado mucha confianza".
El exjugador también fue preguntado sobre su paso por la Masía azulgrana, un año que no lo pasó nada bien: "Me fui muy joven, yo estaba muy apegado a mi familia, tenía 12 años, salí de Albox, mi pueblo, donde estaba con mis amigos y mi familia... Cuando llegué allí me trataron magníficamente pero regresé con mi familia, echaba mucho de menos a mis padres. Lloraba muchísimo, con decirte que las conversaciones por teléfono con mi madre duraban 30 segundos porque era escucharla y ponerme a llorar".
Por último, Diego Capel desveló que tuvo la oportunidad de haber jugado en el Real Madrid, pero al final no sucedió: "Hubo un tanteo en aquella época, estaba con Pedro Bravo en esa época y estaba en la selección, en boca de mucha gente... con apenas 20 años. Estábamos comiendo y recuerdo que me pasó el teléfono, me dijo 'quieren hablar contigo' y era Pedja Mijatovic, me dijo 'oye estamos interesados, estamos a ver si sacamos a Drenthe o a Robinho en este mercado y si lo sacamos vamos a por ti'. Es verdad que yo en esa época intentaba seguir jugando, centrarme en mi foco porque era muy joven, pero feliz porque me quedé en mi Sevilla. No se hizo eso y me quedé en mi casa para poder ganar títulos"