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En la tarde de ayer, apenas unas horas antes del comienzo del partido ante el FC Barcelona, el Sevilla Fútbol Club sorprendía con un comunicado donde anunciaba que ninguno de sus representantes estaría en el palco del estadio de Montjuic como repulsa por del conocido 'caso Negreira' tras la imputación formal del club azulgrana y de algunos de sus exdirigentes por un supuesto delito de cohecho.
En el comunicado publicado por el club nervionense también se anunciaba la suspensión de "los actos protocolarios correspondientes" a dicho partido. Además, el Sevilla anunciaba su "total indignación y repulsa por las prácticas realizadas por los exdirigentes del FC Barcelona" por dicho caso, que "supuestamente constituyen delito para el Juzgado de Instrucción número 1 de Barcelona".
"Por esta razón, el Sevilla ha suspendido los actos protocolarios correspondientes al partido de LaLiga de este viernes 29 de septiembre entre el club azulgrana y el Sevilla FC, y anuncia la ausencia de representación en el palco del estadio de Montjuic", precisa en su nota. Asimismo, añade que, "por el bien de la competición se depuren todas las responsabilidades" y espera que "sucesos como los supuestamente acaecidos no se repitan".
Poco más tarde se conocía la contestación del Barcelona pero también la reacción del máximo accionista del Sevilla Fútbol Club, José María del Nido Benavente, y en plena batalla judicial con los actuales dirigentes (José Castro y su hijo Del Nido Carrasco) por la presidencia del club. El abogado sevillano dejó claro en su estado de Whatsapp lo que opinaba al respecto del comunicado del Sevilla: "La demagogia no cabe en un estado de derecho. Mientras una sentencia firme no diga lo contrario, el Barça es inocente".
Minutos más tarde, era el propio FC Barcelona el que respondía con otro comunicado al Sevilla y dejando claro que rompían las relaciones con el club hispalense y tildando ese escrito de "ataque injustificado e impropio". "Adicionalmente a este desprecio, el club andaluz ha enviado un comunicado a la opinión pública en el que muestra "indignación y repulsa por las prácticas realizadas por exdirigentes del FC Barcelona imputados por el 'caso Negreira'", apunta el club catalán a través de un comunicado institucional.
El Barcelona reivindicaba que el 'caso Negreira' "no puede servir de excusa para tales actuaciones" dado que el procedimiento judicial "se encuentra en una fase de instrucción muy prematura". Por ello, el club señalaba que el posicionamiento del Sevilla "claramente prejuzga unos hechos que, en ningún caso, y en ninguna de sus preliminares e hipotéticas tipificaciones, están acreditados".
El comunicado también hacía mención a que el presidente de la entidad catalana, Joan Laporta, ya intervino hace meses en una asamblea extraordinaria de LaLiga, expresamente convocada para este caso, donde "dio todo tipo de explicaciones y aclaraciones al respecto". Finalmente, daba por "rotas" todas las relaciones con la institución sevillista "en tanto en cuanto no rectifique su actual posicionamiento".