Ya no se trata de un castigo puntual por su alarmante déficit defensivo en San Mamés, sino de una postura firme que condiciona incluso los planes del Sevilla a corto plazo. Y es que ha quedado claro que, a día de hoy, García Pimienta no cuenta en absoluto con Valentín Barco por muchas puertas que se abran en el once debido al carrusel de lesiones que tanto lastran al equipo.
Su ostracismo en el partido la Real Sociedad, en el que el técnico no le consideró tras la lesión de Idumbo, apostando por Navas y desplazando a Lukébakio, ya adquirió silueta de sentencia casi irrevocable, pero todavía le restaba la oportunidad de convencerle durante la semana para ser el sustituto del belga en el costado zurdo una vez que en el lateral ha perdido definitivamente la batalla con Pedrosa, como ha reconocido el propio míster sevillista en rueda de prensa. El argentino se vació en los entrenamientos e, incluso, desató la locura con un golazo durante una de las sesiones previas al encuentro.
Pero nada le sirvió para cambiar su destino, pues García Pimienta ya ha tomado la decisión de que no le cuadra en sus planes y lo demostró sobradamente contra el Leganés, pues prefirió experimentar antes de otorgarle la titularidad como extremo, posición en la que se ha desenvuelto en numerosas ocasiones en Boca.
En este sentido, apostó por Iheanacho en el costado e Isaac Romero por el centro, lo que resultó un fracaso tan estrepitoso como esperado, pues el nigeriano no se encuentra en condiciones de rendir en dicho puesto. Viendo el error, el técnico rectificó sobre la marcha y cambió las posiciones, utilizando al lebrijano por banda, una demarcación en la que no se ha desempeñado desde hace mucho tiempo.
Esta medida tampoco mejoró el ataque, lo que no fue óbice para que apostara por una solución más natural con Barco, al que ya empleó como extremo en la segunda parte contra el Espanyol, no desentonando en absoluto. Pimienta solo agotó tres cambios y dejó sin minutos por segundo partido consecutivo al de 25 de Mayo, confirmado una postura con posibles consecuencias en los planes del Sevilla.
Y es que, inevitablemente, ya empieza circular la posibilidad de que se baraje romper en enero la cesión sin opción de compra pactada por el Brighton para así, en vista de que no cuenta para Pimienta, ahorrarse su sueldo y liberar una ficha para reforzarse en el mercado invernal. A día de hoy no se trata de una opción en firme ni mucho menos, pero si la situación actual persiste -ha jugado 27 minutos en los últimos cinco partidos ligueros- no le quedará otro camino razonable a la dirección deportiva.