Antonio José Medina4 min lecturaSi hace siete meses le hablan a algún sevillista que un equipo viene con más 20 millones de euros -lo que costó en su día- para llevarse a Youssef En-Nesyri es muy probable que hubiera visto con buenos ojos la operación. De hecho, vino uno en el mercado invernal y el primero que no quiso cambiar de aires fue el delantero marroquí.
Pero muchas cosas han cambiado desde entonces. En-Nesyri se convirtió en el segundo jugador del fútbol europeo con más rendimiento goleador de la segunda parte de la temporada, fue clave para que el Sevilla se salvara y lograra su séptima Europa League, y José Luis Mendilibar lo tiene como su máximo referente en ataque del plantel. Y con el único 'intocable', ya que ni estando él ausente, tiene clara la presencia de Rafa Mir como '9'.
En-Nesyri, ahora, cuesta el doble de lo que en su día se habló. La Juventus, que pretendía su fichaje para suplir a Vlahovic, ahora tiene como prioridad retener al serbio. El Nápoles, que buscaba lo propio si salía Victor Osimhen, finalmente va a renovar al africano... Y ninguno de ellos esperaba pagar más de 40 millones por En-Nesyri.
La llegada del dinero árabe aparecía hace dos días como la única puerta para hacer caja y afrontar la renovación de la delantera. Pero los 45 millones que está dispuesto el Al Hilal por el delantero ya no parecen tantos. O, al menos, así lo cree la afición sevillista y lo manifiesta en la #EncuestaHelvetia, donde hay casi tantos partidarios de que el club acepte ese dinero como de que no lo haga bajo ningún concepto.
El hecho de que el mercado de delanteros esté muy parado y que algunos de los mejores ya estén cerrados por otros equipos tiene mucho que ver. Suplir a En-Nesyri no es fácil y antes incluso de venderlo debería tener atado Víctor Orta a su sustituto, ya que cualquier jugador también le costaría un precio fuera de mercado.
Aparte está que el delantero marroquí quiera decantarse por el dinero antes que por su futuro deportivo, como ha hecho hasta ahora. No es lo mismo la Juventus y Nápoles, que son clubes, como poco, similares al Sevilla, que irse a jugar a una Liga inferior con 26 años. Los 45 millones que le ofrecen por tres temporadas son sugerentes, pero no parece tan claro que lo sean para alguien con la visión de su carrera tan definida.
Y aparte estarían los deseos de Mendilibar, que querría un '9' de su nivel para empezar LaLiga y el Sevilla se ha movido en esa posición menos que en otras o, al menos, con menos altura de miras. Si de verdad los ponen sobre la mesa habrá dilema, aunque a ese precio lo lógico es que salga.