Álvaro Palomo3 min lecturaA sabiendas de que Marcos Acuña terminaría saliendo del Ramón Sánchez-Pizjuán, Víctor Orta había rastreado el mercado de laterales zurdos para sustiturle y manejó varios nombres que, una vez confirmado el adiós del 'Huevo', activó para encontrar el relevo deseado.
Finalmente, fue el argentino Valentín Barco el que aterrizó en Nervión tras alcanzar un acuerdo con el Brighton para la cesión durante una temporada sin opción de compra, pero la dirección deportiva también negoció en otros frentes, como recientemente confirmó el director deportivo del Lokomotiv de Moscú ruso, Dmitriy Ulyanov. En este sentido, en declaraciones en su país, aseguró que los nervionenses habían realizado una oferta por Nair Tiknizyan, lateral e interior armenio de 25 años, valorado por Transfermarkt en 6,5 millones.
Ulyanov aseguró que los de Eduardo Dato pusieron sobre la mesa una cesión sin pago añadido, lo que, de ninguna manera, entraba en los planes del club moscovita: "La oferta fue oficial, pero la cesión gratuita no nos convenía".
Ahora ha sido el propio futbolista el que ha reconocido el interés del Sevilla y ha lamentado que los hispalenses no apostaran más fuerte por él, porque le seducía la posibilidad de dar el salto a LaLiga española y militar en el Ramón Sánchez-Pizjuán.
En este sentido, criticó que no subieran su oferta después de que el club sevillista le comunicara que estaban muy interesados en ficharle. "Si tanto me querían, tendrían que haber mejorado la oferta por mí y llegar a un acuerdo con mi club”, afirmó tras el encuentro de Armenia con Letonia el carrilero, que reconoció que el Sevilla habría sido una gran oportunidad para él para continuar con su carrera.
Y es que su deseo es jugar en las principales ligas continentales. “Sí, quiero estar en uno de los grandes campeonatos de Europa, pero no ir como turista, sino a jugar y destacar todo lo que pueda para proseguir mi carrera”, apuntó Tizniyan, que, sobre el papel, habría llegado al Sevilla para competir con Pedrosa y con muchas opciones de ser protagonista.
Frustrado lo del Sevilla, el armenio se quedó en el Lokomotiv, donde tiene contrato hasta 2026, con la ilusión de que en un futuro cercano se abra una nueva puerta: “Continuaré trabajando, es mi obligación. No tengo preocupaciones ni frustraciones, porque se me presentan muchos partidos importantes con la selección de Armenia y también con el Lokomotiv. Confío en que el futuro me depare lo mejor”.