Rafa Gutierrez3 min lecturaCorría el minuto 83 de partido y el Sevilla Fútbol Club veía como la eliminatoria ante el Manchester United se le había puesto cuesta arriba con los dos goles de Sabitzer en la primera parte. El conjunto nervionense había logrado llegar con vida al tramo final del partido, sobre todo después de un casi gol cantado de Antony cuyo disparo se estrelló en el poste y podía haber dejado sentenciada la eliminatoria.
Cierto es que en la segunda parte el Sevilla había mejorado bastante su imagen del primer acto, sobre todo con la entrada al descanso de un Jesús Navas a la postre vital para sacar el empate, y también con la entrada de hombres como En-Nesyri y Suso. Mendilibar mejoró al Sevilla con los cambios y eso se fue notando con el paso de los minutos hasta acabar el conjunto de Nervión dominando el choque en el tramo final. Merced a ese dominio llegarían los goles que en el minuto 83 pocos sevillistas se podrían imaginar...
Entre ellos el exdelegado del Sevilla FC y colaborador de 'El Chiringuito' Cristóbal Soria, que vivió el partido como otro sevillista más y se pudo ver online a través de plataforma de Twitch de dicho programa. Soria sufría y confiaba en un golpe de suerte que pudiera llevar la eliminatoria más ajustada al partido de vuelta en el Ramón Sánchez-Pizjuán y ese llegó en el minuto 84. Con el gol de Malacia en propia puerta tras el pase atrás de Jesús Navas, Soria estalló soltando los cascos y repitiendo a viva voz varias veces: "Gol, gol, gol, gol...".
El contertulio del programa dirigido por Josep Pedrerol casi no podría creérselo llevándose las manos a la cabeza. "Sí, sí, la suerte que queríamos, la suerte", gritaba. "La suerte que necesitábamos... ¡Viva la madre que te parió Jesús Navas, viva Los Palacios, viva Paco Navas y viva tu madre que te ha partido! Necesitábamos un golpe de suerte en el partido y ahora que acabe ya el partido, que acabe ya...", pedía Cristóbal Soria.
Pero es que ni Soria ni cualquier sevillista en ese momento se podía imaginar que todavía estaría por llegar un segundo gol después de que Harry Maguira desviara un remate de cabeza de En-Nesyri en el minuto 92 de partido. En ese momento Soria saltaba del sofa celebrando el empate, llevándose las manos a la cara incrédulo pero sonriente gritando: "¡En-Nesyri te quiero, te quiero, te quiero En-Nesyri!". "Pero que acabe ya por Dios, el golpe de suerte, dos goles en propia meta, el golpe de suerte que necesitábamos", recordaba.