El Sevilla ha tomado la decisión de no firmar a ningún sustituto por Ocampos y limita considerablemente los recursos ofensivos de García Pimienta, que ha perdido a uno de sus puntales en ataque sin recibir ningún refuerzo a cambio.
Una vez oficializada su marcha con el mercado nacional ya cerrado a pesar de que antes ya se había avanzado la operación, la única vía existente era la de incorporar a un agente libre y ninguna de las opciones ha cuadrado. Así, se tanteó con una oferta a la baja a Memphis Depay, que se ha decantado por Corinthians, y finalmente en Nervión se ha optado por esperar al mercado invernal.
Mientras tanto, la solución para cubrir ese vació ya tiene nombres y apellidos, pues será Stanis Idumbo, fichado en enero para el filial, el que complete el ataque nervionense y sea la alternativa en los flancos para Ejuke y Lukébakio. Más allá de la posibilidad de contar con otras vías como Juanlu, al que, de momento, usa en la medular, Navas o Peque, el técnico catalán ha elegido al extremo de 19 años al considerar que, dentro de lo que hay, puede aportar chispa al fútbol sevillista. Así las cosas, ya confió en él en pretemporada, y le respondió con actuaciones prometedoras, y ante el Girona lo hizo debutar en el segundo tiempo.
Así las cosas, Idumbo ha dado el salto a la primera plantilla aunque mantenga ficha del filial como confirma el hecho de que ya no entra en las convocatorias del Sevilla Atlético. De ese modo, el de Melun se quedó fuera de la lista para el partido del domingo al Sanluqueño, que terminó con goleada nervionense por 5-2 en el Jesús Navas. Tampoco lo hizo en la anterior.
Una victoria abultada en casa en la que no se le echó de menos, entre otras cosas, por la irrupción inesperada de un delantero llegado este verano procedente de la Marshall University estadounidense y que dio la sorpresa. Se llama García Pascual y, aunque en principio aterrizó para el segundo filial, fue titular y anotó dos tantos, en el 41' y en el 55', convirtiéndose de repente en una nueva ilusión blanquirroja.
También vieron puerta Mateo Mejía, vigilado igualmente por Pimienta, y Manu Bueno tras, finalmente, quedarse en Nervión. Cabe recordar que el Sevilla cambió de opinión a última hora cuando ya estaba avanzada su cesión, con el Almere City neerlandés como prioridad para el futbolista.