Óscar Murillo4 min lecturaLas inminentes salidas de Iván Rakitic (lo tiene prácticamente hecho con el Al-Shabab hasta el 30 de junio de 2025 y ni siquiera entró en la lista ante el CA Osasuna) y Federico Gattoni (pese al intento final del Cádiz CF, parece que será cedido al Anderlecht) liberarán dos fichas de la primera plantilla del Sevilla FC, prometidas en su día a Lucién Agoumé y Hannibal Mejbri, cuya edad les permitió encontrar acomodo burocrático en los filiales, aunque, visto el inmovilismo general, Víctor Orta se les reserva hasta última hora por si cuadran las cuentas para el aterrizaje de un delantero y (mucho más difícil) un zaguero polivalente. En principio, sin el '10' y el '2', apenas hay margen salarial para acometer una incorporación, aunque en la planta noble del Ramón Sánchez-Pizjuán echan humo las cuentas, mirando de reojo a otras operaciones que sí serían más rentables (Suso, Acuña, Rafa Mir...).
En realidad, el croata perdona gran parte de su salario de la 23/24, pero los saudíes no pagan traspaso, mientras que lo del argentino será una cesión 'a pelo', sin remuneración ahora. Por tanto, al tener los nervionenses sobrepasado el LCPD, LaLiga únicamente les permitirá reinvertir el 50% del ahorro con el ex de San Lorenzo y el 60% de lo que 'perdone' el otrora culé, cuyo sueldo sí supone un 5% al menos de la partida presupuestaria para la primera plantilla. Para convencer a un artillero de cierto nivel, insuficiente. En cualquier caso, el director deportivo blanquirrojo tira de agenda para estar preparado en caso de que los astros se alineen sobre la bocina. Y, según avanza el diario 'As', uno de los nombres que más le gustan arriba es el de Ferrán Jutglà. A sus 24 años, el catalán tiene vinculación hasta 2026 con el Club Brujas, si bien es cierto que ha perdido peso en las alineaciones del conjunto belga, tras un aterrizaje muy sonoro (15 goles y 8 asistencias en la 22/23).
El ex del FC Barcelona, que está igualmente en la órbita del Real Betis, leva tres dianas en el presente curso y difícilmente saldría por una cantidad baja, por mucho que no sea ya indiscutible. Puede actuar tanto arriba como referencia o bien en cualquiera de los dos costados del ataque, pero, con el 1-3-5-2 de Quique Sánchez Flores, aquí sería uno más en la rotación junto a Isaac Romero y Ocampos, la dupla preferida del madrileño en punta. Los de azul y negro pagaron cinco millones de euros por él y su valor de mercado es ya superior (6,5, según 'Transfermarkt'). Orta lo intentará con una cesión que incluya opción de compra, pero lo tiene difícil. Por eso, sigue peinando el horizonte y mirando alternativas. Una de ellas, el eslovaco Bozeník, del Boavista, apuntaba al Hellas Verona, aunque diferentes medios insisten este sábado en que podría haber girado hacia Nervión, mientras que hay contactos con el colombiano Cassierra, del Zenit, con sólo año y medio de contrato, que podría ser una oportunidad.
