Fernando Mateos4 min lecturaCon seis fichajes ya cerrados y un séptimo (el meta Álvaro Fernández) a falta de la oficialidad, el Sevilla FC tiene como absoluta prioridad reforzar el eje de la zaga. Hasta la fecha, García Pimienta no ha podido contar con Badé, por el que se ha interesado la Roma tras su buen papel en los Juegos Olímpicos, y tampoco ha podido tirar por lesión de Kike Salas en los últimos amistosos, si bien se confía en que el canterano pueda ser de la partida en el debut liguero ante la UD Las Palmas. Pero, más allá de la ausencia de sus dos teóricos centrales titulares, el último test ante el Liverpool evidenció los graves problemas defensivos de un equipo que aún no ha asimilado los conceptos de su nuevo técnico en este faceta.
Al margen de los dos mencionados zagueros, las alternativas son Nianzou, que sigue arrojando muchas dudas, y Gudelj, que ha sido utilizado por el preparador catalán también como mediocentro y cuya salida no se descarta aún, pese a enfriarse el interés del Al-Shabab. No hay más donde elegir, puesto que el lesionado Marcao es en realidad un descarte al que se le han dado algunos minutos en pretemporada. No ha disgustado del todo el brasileño al entrenador, pero sus problemas físicos aconsejan al club a buscarle una salida, nada sencilla por otro lado.
En este escenario, Víctor Orta maneja varios nombres para apuntalar una defensa que tiembla por calidad y cantidad. La opción de Lenglet ha sido tanteada y cada vez está más cerca un acuerdo para que salga cedido del FC Barcelona, que pasa por asumir parte de su ficha el club azulgrana y renunciar a otro porcentaje el propio jugador. Pero ni así parece viable su encaje en la masa salarial nervionense, siendo el Atlético de Madrid y el Villarreal los clubes mejor colocados.
Al margen del francés, también ha habido movimientos por el cotizado Arouna Sangante, en la órbita igualmente de Augsburgo y Stuttgart, así como por el esloveno Vanja Drkusic, que ha cuajado una buena Eurocopa con su selección, lo que le ha colocado en el escaparate. Fue el propio director deportivo de su equipo, Dmitri Rubashko, el que desveló el interés en el zaguero de 24 años, a priori una opción económica, pues sólo le resta un año de contrato con el Sochi, del que tiene decidido salir sí o sí tras su descenso a la segunda división del fútbol ruso.
Se anunció incluso una oferta sevillista por valor de 3,5 millones de euros, proponiéndole al futbolista un contrato por cuatro temporadas. Pero su club comenzó pidiendo 7 kilos y luego rebajó sus pretensiones a 5, manejando diferentes ofertas en una puja que ya parece tener vencedor. Si días atrás se apuntaba que estaba cerca del PAOK de Salónica, en las últimas horas era Osasuna el que se metía de lleno en la pelea, pero la propuesta navarra, que ascendía a 3 millones más variables, tampoco ha sido aceptada por el Sochi.
Así, medios rusos como RPL Sky señalan que finalmente Drkusic no saldrá del país, poniendo rumbo a un Zenit con el que firmará por cinco campañas, según habría confirmado su propio agente. No se desvelan, sin embargo, las cifras del fichaje, pero el club de San Petersburgo sí habría mejorado las dos propuestas que han llegado desde LaLiga, tal y como apunta también Diario de Navarra.