Hubo una fase en la presente temporada en la que García Pimienta parecía haber dejado fuera de sus planes a Kike Salas, que había pasado de un rol principal en la defensa de cinco de Quique a contar con un rol residual, hasta el extremo de que todo apuntaba a que se erigía en la última opción para el técnico sevillista en el centro de la zaga.
No en vano, solo disputó 12 minutos entre la jornada 7 y la 11, y en el momento de la verdad, ante la baja de Marcao, Pimienta se decantó por Nianzou en lo que apuntaba a un 'sorpasso' en la lista de preferencias para el eje de la defensa. En ese momento, cuando el moronense tocaba fondo en cierto modo, desde su entorno se aseguró a ESTADO que Kike Salas estaba muy tranquilo, que sentía la confianza del míster a pesar de que dispusiera de menos protagonismo. En este sentido, su círculo descartó cualquier posibilidad de salida en el mercado invernal y afirmó que seguro que llegaría su oportunidad para recuperar el protagonismo.
Y lo cierto es que ha sido así, pues la situación del canterano ha experimentado un giro brusco en el Sevilla en las últimas semanas, pues ha aprovechado la oportunidad que le han brindado las bajas por lesión de Badé y Nianzou, que se habían consolidado como la pareja titular. A pesar de haber sufrido dos derrotas, Kike Salas ha cumplido ante la Real Sociedad y el Leganés y se ha erigido en la pieza más fiable en la zaga, con concentración, anticipación y poderío aéreo.
Así las cosas, Pimienta ha confiado en él en los dos encuentros, mientras que a Marcao lo castigó con la suplencia en Butarque tras su error garrafal contra la Real con un penalti absurdo. El canterano ha subido un peldaño en el listado de centrales nervionenses y se ha convertido en competencia real para Badé y Nianzou de cara a la vuelta del parón. A priori volverían al once los dos galos, pero el sevillano también presenta su candidatura y genera dudas reales en Pimienta, que ya antes del partido ante el Espanyol admitió que no tenía demasiado claras sus prioridades en el eje de la defensa, pues los cuatro se encontraban preparados. Desde entonces, Marcao se ha caído de esa ecuación y Kike Salas ha crecido enteros.
Un buen momento coronado con la llamada de Santi Denia para la concentración de España sub 21, lo que ha llenado más si cabe el depósito de confianza de Kike Salas, completamente sumado a la causa y que crea un poblema (bendito) a Pimienta.