Cal y arena en el último entrenamiento del Sevilla antes de jugarse seguir en Europa

Pendientes de Bono, de las bajas seguras y de los tocados, Sampaoli ha dirigido el segundo y último entrenamiento previo al duelo de este martes en el Ramón Sánchez-Pizjuán frente al FC Copenhague, una final para poder seguir en competiciones continentales

Aitor TorviscoAitor Torvisco 5 min lectura

El Sevilla FC ha realizado en la mañana de este lunes su segundo entrenamiento posterior al 3-1 encajado ante el Real Madrid el sábado en el Santiago Bernabéu, en la primera derrota de la segunda 'era Sampaoli', y el último previo al duelo de este martes contra el FC Copenhague, en la quinta jornada de la Fase de Grupos de la Champions League. Después de la habitual sesión de recuperación del domingo, hoy el técnico nervionense ha afinado la puesta a punto en una sesión en la que no ha faltado la cal ni la arena.

La arena ha corrido a cargo de Karim Rekik, que se lesionó a primeros de septiembre y recayó el pasado 1 de octubre tras aguantar sólo 28 minutos en el duelo ante el Atlético. El central neerlandés se ejercitó de manera parcial el domingo y hoy se ha dejado ver junto al resto de sus compañeros en el espacio abierto a los medios gráficos. Aunque aún parece precipitado pensar en su regreso ante el Copenhague, su presencia en el entrenamiento supone una alegría para Jorge Sampaoli ante las bajas que sufre el equipo, aunque Kike Salas vuelve tras cumplir sanción en LaLiga.

Acuña despierta suspicacias; Navas, incondicional

Más arena. En la sesión de este lunes se ha dejado ver Marcos Acuña, quien no se ejercitó el domingo ni participó en el choque ante el Madrid por unas interminables molestias físicas que hay quien 'sospecha' que no van a desaparecer hasta después del Mundial. También se ejercitado con aparente normalidad Jesús Navas, quien pidió el cambio y acabó tocado el partido en el Bernabéu.

Bono, ausencia inesperada

El cargamento de cal, un día más, lo pone Fernando Reges. El mediocentro brasileño lleva de baja desde mediados de septiembre por culpa de una mononucleosis -más conocida como la 'enfermedad del beso'- de la que no termina de librarse. Se trata de un futbolista imprescindible en este Sevilla FC, pero Jorge Sampaoli aún no ha podido contar con él desde su llegada.

No obstante, la ausencia más inesperada fue la del portero Yassine Bono, que siguió el entrenamiento de cerca, pero con calzado de calle, sin quitarse el chándal y sin ejercitarse, pendiente de unas pruebas para saber si podrá jugar mañana o no.

El capítulo de bajas lo completan los lesionados Jesús Manuel 'Tecatito' Corona, que después de ser operado del tobillo en agosto se afana por intentar llegar a tiempo de jugar el Mundial con México, y Tanguy Nianzou, que el pasado miércoles sufrió una rotura fibrilar en el cuádriceps en la jornada intersemanal frente el Valencia CF.

Cabe recordar que, a las bajas seguras de Fernando, Nianzou y Corona, más las dudas de Acuña y Navas, se une Óliver Torres. El centrocampista extremeño, fijo en las alineaciones ligueras y máximo goleador del Sevilla FC en lo que va de curso empatado con Erik Lamela (3 goles cada uno), no fue inscrito para la Fase de Grupos de la UEFA Champions League en una decisión de Julen Lopetegui que el tiempo se ha encargado de calificar como errónea.

Sólo vale ganar y esperar

El partido de este martes ante el FC Copenhague es de una importancia capital para el Sevilla FC. Las cuentas para lograr un casi quimérico pase a los octavos de final se limitan a la necesidad de ganar los dos partidos que quedan y que el Borussia de Dortmund pierda ambos.

Más allá de eso, del duelo contra el equipo danés saldrá casi con total seguridad el equipo eliminado de competiciones europeas y el favorito para ser tercero y recalar en la Europa League. Copenhague y Sevilla están empatados a dos puntos, con 0-0 en el primer duelo y con un ajustado 'goal-average' de -7 para los de Sampaoli y -8 en el cuadro nórdico.