Sergio Ramos y su mujer, Pilar Rubio, han presentado una segunda denuncia, ampliación de la primera ante la Guardia Civil, esta vez ante la Policía Nacional, en la que especifican el botín que se llevaron los asaltantes de su casa el pasado 20 de septiembre, cuando varios ladrones accedieron a la Finca La Alegría (en Bollullos de La Mitación) mientras el futbolista disputaba con el Sevilla FC el encuentro de la Champions League ante el RC Lens y la presentadora se encontraba igualmente fuera por motivos profesionales. En la propiedad de la Urbanización La Juliana se encontraban los cuatro hijos de la pareja y sus cuidadoras, aunque, por fortuna, no se tienen que lamentar daños personales, aunque sí cuantiosos materiales.
Según 'El Mundo', el camero y su esposa han detallado que el valor de todo lo sustraído rondaría los 350.000 euros: tres relojes de la marca de lujo Patek Philippe, valorados en 200.000 euros; ropa (abrigos, sudaderas, pantalones, camisetas, zapatos, botas) valorada en 80.000 euros; media docena de colgantes de oro tasados en 10.000 euros y tres anillos del mismo metal precioso, con un valor de 5.000 euros; cinco bolsos Louis Vuitton, de unos 20.000 euros; y cuatro maletas de la misma firma francesa, que alcanzarían los 25.000 euros; y unos 15.000 euros en metálico. Un montante que convierte esta operación en la más lucrativa, de largo, de cuantas han efectuado presuntamente los mismos autores en otras zonas del Aljarafe sevillano (Gines, Camas...).
Además, el diario 'Abc' recoge la información de que en esta ampliación de la denuncia se añade un detalle que puede ser clave en la b, que está llevando en estos momentos la Policía Judicial de la Benemérita: los individuos que entraron en La Alegría conocían la ubicación de las cámaras de seguridad y fueron evitando ser grabados por ellas en su camino directo hacia la habitación de matrimonio, que forzaron para llevarse el preciado botín, por lo que el medio de Vocento da por hecho que tuvieron la ayuda de, al menos, una tercera persona que conocía el recinto, algo que los expertos consultados por el citado diario ya habían apuntado previamente y que suele ser un 'modus operandi' típico de estas bandas de ladrones.
Al malestar anímico y económico se sufrir un robo de estas características, trance por el que pasaron igualmente la cantante y presentadora María del Monte junto a su mujer, la periodista Inmaculada Casal, en otra de las fechorías cometidas seguramente por los mismos autores, se añade ahora la sospecha sobre los trabajadores de la finca. En estos casos, los señalados suelen ser empleados coyunturales, operarios de servicios u otro personal no fijo que conociera el interior de las instalaciones y diera el chivatazo a los que días después perpetraron el asalto y la sustracción de enseres personales y de valor del domicilio sevillano de Sergio Ramos y Pilar Rubio.