Aitor Torvisco6 min lecturaEspaña le ha cambiado la vida al delantero Valentín Mariano José Castellanos Giménez, delantero argentino de sólo 24 años que se ha convertido en una de las revelaciones de la pasada temporada en LaLiga gracias a sus 14 goles y una asistencia con la camiseta del Girona FC, club en el que ha jugado cedido por el New York City, que afronta este verano con la idea de hacer caja con el de Mendoza y abre bien los oídos para escuchar ofertas antes de decantarse por el mejor postor. Y es que los dueños del acaudalado City Group ven negocio con el Taty, a quien no le paran de salir opciones en los principales campeonatos europeos, elevando mucho la competencia para el Sevilla FC, uno de los clubes que más interés han mostrado en hacerse con sus servicios para la 2023/2024.
El Taty Castellanos es uno de los delanteros de moda desde que le dio por firmar el partido de su vida ni más ni menos que contra el Real Madrid, a quien ajustició anotando los cuatro goles que pusieron boca abajo al estadio de Montilivi en la victoria por 4-2 frente al equipo de Carlo Ancelotti. Ese encuentro le dio una dimensión internacional al argentino, que este mismo domingo copa la portada de Record, periódico deportivo portugués que le sitúa como objetivo número uno del Benfica SL si finalmente los encarnados deciden traspasar a Gonçalo Ramos.
En este sentido, el diario luso asegura que el precio de salida del Taty rondaría los 15 millones de euros, precio que coincide con la cifra estipulada como opción de compra en su contrato de cesión al Girona FC y que se escapa del presupuesto del conjunto catalán (también integrado en el City Group), que ha preguntado por el hispano-dominicano Mariano Díaz (libre tras salir del Real Madrid) como posible sustituto.
Tal y como avanzó el conocido periodista César Luis Merlo, el Sevilla FC sigue apareciendo como la opción más firme que tiene en Europa y una gran oportunidad para seguir en LaLiga, donde el delantero de 24 años se ha adaptado a las mil maravillas. No obstante, en Nervión están en pleno terremoto en su área deportiva por la posible marcha de Monchi y eso podría ser un handicap importante en una operación en la que el más rápido de movimientos siempre parte con ventaja.
La competencia, además, es un factor muy importante; pues además de la noticia que informa de que el Benfica SL se suma a la puja por el joven goleador con el flamante heptacampeón de la Europa League (ambos jugarán la próxima edición de la Champions) cabe recordar que el Taty también está en la agenda de otro campeón continental como es el West Ham United inglés, reciente ganador de la Conference League y con sobrado potencial económico para afrontar las exigencias del City Group y para tentar con una atractiva ficha al jugador, que tiene contrato en vigor con el New York City de la MLS estadounidense hasta el 31 de diciembre de 2025.
En Nervión, el Taty Castellanos tendría que luchar por la titularidad con Youssef En-Nesyri, siempre que el marroquí decida permanecer con los oídos tapados y sin querer escuchar las ofertas que muchos conjuntos europeos (especialmente de Inglaterra) están dispuestos a volver a poner sobre su mesa. El argentino llegaría previsiblemente para suplir una más que probable salida de Rafa Mir, quien ya estuvo en la rampa de salida en el pasado mercado invernal y que, después de tener un rol secundario con tres entrenadores diferentes, tiene muchas papeletas para hacer las maletas. Por las condiciones de una salida del murciano han preguntado ya varios conjuntos, aunque el más interesado ha sido el RC Celta de Vigo, que tiene pensado reinvertir parte de los ingresos por Gabri Veiga en un goleador que ayude a Iago Aspas a asumir la responsabilidad anotadora.
El Sevilla FC ya sabe del potencial del Benfica, uno de los clubes europeos que mejor venden, como rival por un futbolista. Lo ha comprobado este mismo verano al hacerse con los servicios del centrocampista Orkun Kökcü, seguido por Monchi desde hace años y a quien ojeadores nervionenses han ido a ver en directo esta misma temporada, en la que se ha salido en las filas del Feyenoord neerlandés. Las Águilas, que le presentaron este sábado de manera oficial, han pagado 25 millones de euros más cinco en variables y le ha puesto la cláusula más alta de la historia del fútbol portugués, 150 millones.