En las últimas horas se está hablando mucho de las acciones polémicas en el partido del pasado domingo entre el Sevilla FC y la UD Las Palmas. El equipo grancanario se marchó de Nervión muy enfadado con el arbitraje de Martínez Munuera. Jugadores como Jonathan Viera o Álvaro Valles, en zona mixta; el entrenador, Xavier García Pimienta, desde la sala de prensa y, sobre todo, la afición del equipo amarillo, que explotó en redes sociales, mostraron su indignación y denunciaron que habían sido claramente perjudicados en el partido que perdieron por la mínima (1-0) en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán. Reclamaban dos penaltis sin señalar y una expulsión perdonada a Rafa Mir por una supuesta agresión sobre Mika Marmol. Sin embargo, más allá de los matices a la hora de opinar si era roja o no y si el colegiado debió señalar pena máxima o no, ese análisis resulta del todo parcial. No en vano, obvia que mucho antes de esas tres acciones que llegaron aún con 0-0 en el marcador el delantero visitante Sory Kaba propinó un fuerte codazo a Loïc Badé, que necesitó asistencia médica para poder frenar la sangrante hemorragia en su nariz.
La acción tuvo lugar en el minuto 18 y estuvo a punto de dejar fuera de combate al joven central francés, que quedó algo aturdido por el golpe y estuvo sangrando de manera abundante durante unos minutos. Mendilibar se quedó varios minutos con un jugador menos e incluso mandó calentar a Nemanja Gudelj por si su compañero no podía seguir. Por suerte, Badé pudo volver al terreno de juego y completar el encuentro. No sin dolor, evidentemente. Y soportando las molestas secuelas que le acompañarán un tiempo. El internacional sub 21 con la 'Bleu' ha compartido en redes sociales una imagen de cómo quedó su camiseta tras el partido: totalmente manchada de sangre y con una apariencia más propia de un conflicto bélico que de un partido de fútbol.
"Fue la guerra", añade en su 'storie' de Instagram un Loïc Badé que este martes, en el último entrenamiento previo al estreno del Sevilla FC en la Fase de Grupos de la UEFA Champions League, este miércoles ante el RC Lens de nuevo en el Sánchez-Pizjuán, ha llegado al vestuario con una aparatosa máscara protectora. Su compañero, Lucas Ocampos, no ha perdido la oportunidad de bromear y ha compartido la imagen junto a una canción de la banda sonora de 'El Zorro'.
La UD Las Palmas reclamó dos posibles penaltis -uno de Sergio Ramos a Sory Kaba y otro de Pedrosa a Kirian- y una expulsión de Rafa Mir por lo que entienden que fue una agresión a Mika Marmol. Al delantero nervionense, exjugador canarión, le han criticado hasta desde los Pirineos. El técnico del FC Andorra, otro ex de la UDLP y también del Betis como es Eder Sarabia, defendió a su jugador Aurélien Scheidler... ¡atacando al murciano! Y obviando esta otra agresión de Kaba a Badé.
Scheidler fue expulsado en el Andorra-Oviedo por una acción muy similar a la de Rafa Mir y, para defenderle, el que fuera asistente técnico de Quique Setién decidió atacar a Rafa Mir y al "teatro" de David Costa, central del conjunto asturiano. "Ellos venían exagerando todo el rato. A mí no me gusta que se exagere, que se chille, que se pierda tiempo... David Costas hace un teatro de cojones, ésa es la realidad. Ayer hay una jugada entre Rafa Mir y Mika Mármol con el triple de intención (de agredir, se entiende) y no le expulsan. Lo que pasa es que Aurélien es un tío grande y está protegiendo la pelota, no es expulsión jamás en la vida. Nos ponen 400 millones de vídeos para decirnos que tiene que haber gesto de verdad, ¿y le expulsa ahí? Pero por favor, por favor, hombre... No es expulsión jamás en la vida", espetó Eder Sarabia.