No es ninguna novedad que Youssef En-Nesyri es reacio a marcharse del Sevilla FC. Cuando más arreciaba el viento en contra, hace dos temporadas, rechazó una gran oferta del West Ham que también solucionaba problemas salariales en Nervión para colaborar en la salvación blanquirroja y, en ventanas posteriores, hizo oídos sordos ante otra propuesta rimbombante del Al-Hilal, en este caso por su convicción, mantenida en el tiempo, de que tiene fútbol para seguir en las cinco grandes Ligas. Y en ésas está el marroquí. A sólo un año de que expire su vinculación con la entidad del Ramón Sánchez-Pizjuán, con una cantidad ya irrisoria de amortización pendiente pero un sueldo alto para la actual situación del club presidido por José María del Nido Carrasco, el '15' continúa poniendo trabas a un adiós hacia torneos exóticos, apostando de forma arriesgada a una sola carta.
El gran problema es que los pretendientes que volvieron a llamar a su puerta se han cansado de esperar o, lo que es peor, de sus negativas. Dos de los últimos (los 'Hammers' y el Al-Qadsiah de Míchel) se han unido a su gran deseo (la Roma) en la subasta por el noruego del Villarreal CF Alexander Sorloth, que prefiere quedarse en La Cerámica, donde, con ese aval, señalan los 38 kilos de su cláusula de rescisión. Para cubrirse las espaldas, los saudíes han pagado ya casi 14 por el artillero colombiano del América Julián Quiñones. Además, el Fenerbahçe de José Mourinho se centra ahora en el atacante del Milan y ex del Real Madrid Luka Jovic, con una propuesta monetaria similar a la presentada a En-Nesyri: ingresar en el primer escalón salarial del plantel, con unos 4 millones de euros netos de sueldo (como Saint-Maximin, Tadic, Dzeko o Fred).
Prefiere ganar menos dinero en la capital italiana el internacional marroquí o todavía un montante inferior en el Sevilla FC, eligiendo ya sin ataduras su destino el verano que viene. En Nervión no saben nada de la Roma, que, como se ha dicho, explora alternativas mejor colocadas que Youssef, con cuyo agente, no obstante, ya tiene un acuerdo por cuatro temporadas a razón de 2,5 kilos fijos y otros 500.000 euros en incentivos por rendimiento. En realidad, no sería un gran salto en lo que a sueldo se refiere para el punta, sin aproximaciones interesantes (ni para él ni para el dueño de sus derechos) desde la Premier League, ni siquiera con Julen Lopetegui al frente del West Ham ni muchas ganas de estrenarse en la Ligue 1, donde ya desechó en su día al Niza. Más recientes son los sondeos desde Rusia, Qatar y Emiratos Árabes que se ha negado en rotundo a atender, cerrado en banda. A 17 de julio, o Roma o no sale.