El Sevilla FC, pese a las críticas feroces de su máximo accionista y alguna denuncia más sobre lo inviable del proyecto, sigue adelante con el Nuevo Ramón Sánchez-Pizjuán, que debería estar listo para 2028. Con el fin de hacerlo realidad, la entidad de Nervión recurrió para el anteproyecto a la firma Idom, responsable de San Mamés, el Monumental de Buenos Aires, el Ciudad de Valencia y La Cerámica, los estadios de Athletic Club, River Plate, Levante UD y Villarreal CF, respectivamente. Presentado en la junta general de accionista celebrada el 4 de diciembre de 2023, ha sido analizado por uno de sus responsables, César Azcárate, arquitecto que, entre otras cuestiones, ha defendido, en una entrevista difundida este domingo en los medios oficiales blanquirrojos, detalles como la cubierta del recinto, seguramente uno de los puntos más censurados y comentados del diseño.
"Lo primero que hicimos cuando recibimos el encargo fue conocer muy bien la idiosincrasia del club, su historia, la ciudad y, especialmente, el entorno en el que se encuentra el estadio. Para ello, metimos en el equipo a gente sevillista y establecimos un diálogo continuo con el propio club", explica el profesional vasco, que analiza lo que para Del Nido Benavente convertía a la parte superiores en "un fregadero", reclamando que sea "aerodinámica, como las del Athletic o el Barça", por poner dos ejemplos: "No es la habitual, pero es la más eficiente para expandir la sombra a la zona exterior, a esa zona sur que será un punto muy importante, y a las zonas curvas del graderío. La sombra es clave en un lugar como Sevilla. Es original, singular y muy interesante desde el punto de vista arquitectónico. Creo que, una vez esté terminada, la gente la mirará con admiración".
Y Azcárate no se queda ahí: "La principal mejora pare el aficionado es la comodidad de un graderío moderno y diseñado para tener más amplitud, movilidad y practicidad. Habrá espacios en las gradas altas que den a la ciudad y, en las gradas bajas, zonas boulevard. Se incrementarán mucho las zonas de hospitality en diferentes formatos, cuestión importante en la generación de ingresos. Y Gol Norte será en forma de muralla que no existe aún en España. Es una propuesta que hará que la caldera que es hoy el Ramón Sánchez-Pizjuán lo sea mucho más. Sabemos que tiene una muy buena acústica, pero el nuevo estadio la tendrá mucho más presionante. Nos hemos empapado de la historia del campo para mantener su esencia en el nuevo. Hemos mantenido el mosaico de su fachada principal en el mismo lugar, pero rebajado al nivel del suelo exterior, ya que el estadio irá algo soterrado por dentro. El club nos dejó claro que había que conservarlo, y eso hemos hecho".
Por último, el arquitecto de la que será la futura casa del sevillismo recuerda que la zona anexa a 'La Bombonera' en dirección a la calle Luis Arenas Ladislao se erige en otro de los grandes atractivos del anteproyecto presentado por Idom y que firma él mismo: "El estadio será más moderno, confortable, de última tecnología y aún más relacionado con la ciudad, con su entorno urbano. El nuevo Ramón Sánchez-Pizjuán se utilizará a diario, no cada 15 días, activando a la propia Sevilla no sólo a los aficionados al fútbol y al Sevilla FC. La nueva plaza exterior en la zona sur dará provecho a esa zona urbana con lugares de ocio y culturales y le dará vida".