Álvaro Palomo3 min lecturaErik Lamela ya mira más allá del Ramón Sánchez-Pizjuán, pero su mirada tampoco se transporta demasiado lejos. El argentino termina contrato el próximo 30 de junio y entra dentro del grupo de futbolistas que, salvo sorpresa, no continuarán en Nervión la temporada próxima.
La renovación no cuadra en el proceso de renovación puesto en marcha por Víctor Orta y no se ha barajado en la planta noble con énfasis y menos después de que las lesiones y la falta de protagonismo estén convirtiendo en un calvario la presente temporada para el atacante.
No obstante, la novedad en su futuro no reside en que ponga fin a su etapa como nervionense, pues hace un tiempo que admite poca duda, sino el plan de Lamela una vez que concluya su vinculación en el Sevilla, pues se ha filtrado que dista del que se esperan en un principio.
Así las cosas, todo apuntaba a que a sus 32 años y un tras un largo recorrido en el Viejo Continente haría las maletas para regresar a su país y, posiblemente, recalar en River Plate, que ha mostrado interés en contar con sus servicios una vez se desvincule del Sevilla.
Sin embargo, desde la propia Argentina aseguran que Lamela ya ha tomado una decisión y no pasa por, ahora, por volver a vestir la elástica de los Millonarios. Así, el periodista de TyCSports Germán García Grova ha afirmado tajantemente que el de Carapachay ha decidido continuar varias temporadas en Europa antes del retiro en el fútbol de su país, pues se considera apto y fuerzas suficientes para seguir compitiendo al máximo nivel. Una determinación que ha decepcionado en Argentina, donde esperaban verle de vuelta cuanto antes.
El 'Coco' se formó en las inferiores de River, dio el salto muy joven al primer equipo y no tardó en despuntar, hasta el extremo que pronto, hace ya 13 años y medio, atravesó el Océano Atlántico para recalar en las filas de la Roma, que pagó 17 millones de euros. Dos veranos después, el Tottenham abonó 30 millones y en 2021 entró en la operación de Bryan Gil con los Spurs para convertirse en futbolista del Sevilla, en el que ya forma parte de la historia por su gol en las semifinales de la pasada Europa League contra la Juventus.
Esta campaña ha encadenado lesiones y tan solo ha podido jugar 746 minutos repartidos en 15 partidos, con un saldo de dos goles y una asistencia.