Jesús Galiano4 min lecturaEl Milan y la Fiorentina firmaron un intenso empate a dos goles (2-2) en un encuentro en el que ambos conjuntos llegaron a soñar con la victoria. El protagonista de la noche fue Luka Jovic, quien marcó el gol del empate definitivo ante su exequipo, días después de realizar duras declaraciones sobre su paso por el club viola. El punto, sin embargo, deja a ambos equipos fuera de puestos europeos, con un sabor agridulce que no termina de satisfacer a ninguno.
El conjunto rossonero volvió a evidenciar sus problemas defensivos desde el arranque. En apenas diez minutos, la Fiorentina ya había golpeado dos veces. Primero fue Thiaw, que anotó en propia puerta tras un centro de Gudmundsson, tras un grave error de Musah en la salida de balón. Apenas unos instantes después, Moise Kean culminó una gran jugada colectiva para firmar el 0-2.
Con la presión en aumento, el Milan intentó despertar. Por el costado izquierdo, Theo Hernández y Leao comenzaron a generar peligro. Fue entonces cuando Abraham, tras combinar con Pulisic, recortó distancias con un disparo ajustado ante David de Gea (23’). El tanto reactivó al público de San Siro, que empezaba a impacientarse.
El técnico Conceiçao no tardó en mover el banquillo: retiró al criticado Musah, que no tuvo su mejor noche, para dar entrada al serbio Jovic. Desde entonces, los locales se lanzaron en busca del empate, pero se encontraron una y otra vez con un De Gea monumental, que evitó el 2-2 antes del descanso con intervenciones de mucho mérito.
Tras la reanudación, el encuentro se convirtió en un ir y venir constante. Ambos porteros brillaron con intervenciones salvadoras. Hasta que, en el minuto 64, Jovic aprovechó un pase en profundidad de Tomori y, tras una mala coordinación defensiva de los visitantes, definió cruzado para poner el empate en el marcador.
Con ese tanto, el ex del Real Madrid suma dos goles en apenas 200 minutos disputados en esta temporada, convirtiéndose en un revulsivo inesperado para los milanistas. Kean y Theo volvieron a tener ocasiones, pero tanto Maignan como De Gea evitaron nuevas celebraciones.
La emoción se mantuvo hasta el final. En el minuto 89, Dodô llegó a marcar tras una volea espectacular, pero el tanto fue anulado por fuera de juego. Fue el último sobresalto de una noche intensa que terminó sin un ganador claro.
Aunque el Milan mostró carácter para remontar, el resultado lo mantiene noveno, a ocho puntos del cuarto lugar y con un partido más, lo que complica seriamente sus aspiraciones a volver a la Champions League. La Fiorentina, por su parte, se mantiene sexta, pero cada vez con menos margen de error.