Fernando Mateos4 min lecturaSuspendido temporalmente por la FIFA como presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales se enfrenta a posibles penas de hasta cinco años de cárcel después de que Jenni Hermoso formalizara su denuncia por un presunto atentado contra su libertad sexual. El caso, por tanto, ya está en los tribunales, después de que todo el mundo haya visto la imagen del motrileño besando a la futbolista española en la ceremonia de entrega de medallas tras la conquista del Mundial de fútbol femenino por parte de la selección española.
Pero al mismo tiempo, no es el único frente que Rubiales tiene abierto en los juzgados. Según ha desvelado El Periódico de España, el ya ex presidente de la RFEF deberá duplicar la pensión alimenticia que abona a su exmujer por las tres hijas que tienen después de que la Justicia haya comprobado que existe un “incremento sustancial” de sus ingresos económicos, tal y como recoge una sentencia de la Sección Décima de la Audiencia Provincial de Valencia.
A tenor de los datos recabados en base a sus declaraciones de la renta, las ganancias de Rubiales se han multiplicado por diez en la última década, pasando de 97.237 euros en 2011 a 955.079 euros en 2020 como rendimientos netos de su trabajo. Por entonces, el granadino ya llevaba más de dos años en un cargo del que ahora ha sido apartado de forma provisional, pero sus ganancias como máximo mandatario del fútbol nacional también han ido aumentando desde 2018. No en vano, en 2020 ganó más de cuatro veces más que en su primer año como presidente.
Este incremento de sus ingresos llevó a su ex pareja a pedir una revisión de la pensión alimenticia que recibe y la Justicia ha determinando que la misma sea del doble, después de que el propio Rubiales rebatiera dicha petición y consiguiera rebajar las pretensiones iniciales de su ex mujer, de la que se divorció en 2013, quien pedía que el incremento de dicha pensión fuese del cuádruple.
En su defensa, el motrileño puso como justificación el "carácter temporal de los cargos que ostenta como presidente de la Federación Española de Fútbol, y como vicepresidente de la UEFA", puesto del que también ha sido suspendido, para tratar de evitar una subida en la cuantía de los pagos destinados a sus tres hijas, si bien los magistrados rechazaron sus argumentos al comprobar que existe un "incremento sostenido en el tiempo y creciente de sus ingresos".
Ahora bien, de confirmarse su cese definitivo de los cargos que venía ostentando tanto en la RFEF como en la UEFA, Rubiales podría ver cómo se da marcha atrás en este asunto, pues la sentencia también recoge que "en el caso de que sus retribuciones mengüen también con carácter duradero y de manera significativa, pueda interesar la reducción de su contribución alimenticia para sus hijas”.