El ambiente en Mestalla era espectacular. Una marea colombiana invadía el templo che para el partido que mide a su selección con Irak. Todo iba bien, en medio del algarabío del público, muy metidos en el choque y animando a Colombia, hasta que llegó el minuto 15. Fue entonces cuando varios aficionados del país sudamericano empezaron a pelearse entre ellos. Ha sido un grupo no muy amplio, pero el suficiente como para manchar la imagen del deporte.
Se han visto sillas volando para intentar impactar en otras personas y en varias ocasiones lo han conseguido y no a mucha distancia. El enfrentamiento ha empezado cara a cara, pero se han separado unos metros los grupos involucrados, mientras el resto del público intenta increparlos con sus ruidos para mostrarles lo deplorable de lo que estaban haciendo.
La seguridad presente en Mestalla tardo unos minutos en poder llegar y poner orden. Seguidamente, y mientras se seguían intentando golpear, expulsaron del campo a estos aficionados que según algunos testigos eran de diferentes equipos de Colombia y la trifulca pudo comenzar por ese motivo.
Además de la camiseta tricolor del combinado sudamericano, en las gradas y en las calles se pudo ver a seguidores colombianos con los colores de de Millonarios y Nacional, entre otros equipos de aquel país. Asimismo, una hora antes del partido la Policía Nacional intervino por algunos disturbios en una calle cercana al estadio de Mestalla sin que finalmente se produjeran detenidos.
El encuentro iba 0-0 y así concluyó la primera parte. La que debía ser una fiesta del fútbol para lo colombianos en Mestalla ha acabado en pelea y han dejado el estadio che con bastantes butacas menos. No ha habido heridos y el partido ha seguido su curso en todo momento, aunque, eso sí, con los problemáticos ya en la calle y alejados del fútbol. Un deporte al que han empañado sin necesidad. Los propios seguidores de la selección cafetera se han pegado entre ellos, lo que le hace tener aún menos sentido a lo que ha ocurrido.
Recordemos que era el minuto 15 del encuentro cuando en una zona repleta de camisetas amarillas, un grupo de algo más de 20 seguidores han comenzado una trifulca, a lanzarse asientos tras arrancarlos y ha agredirse, ensuciando un Colombia - Irak que sobre el césped sí está siendo un partido amistoso, en las gradas, lamentablemente, la historia ha sido bien diferente.