La historia de Jorge Vilda y la selección española parece estar destinada a no acabar. Si su salida del combinado femenino de fútbol fue tortuosa, ahora el camino del técnico se vuelve a cruzar con la disputa de este sábado 7 de septiembre del choque entre Marruecos y España en el Grupo C del Mundial Femenino Sub-20.
"Queremos jugar el partido contra España de la misma manera que contra Estados Unidos, a plantar cara y competir. Contra Estados Unidos hemos competido contra una de las mejores selecciones en jugadas a balón parado, creo que es la mejor selección del mundo y las hemos defendido muy bien", comenta Vilda tras caer contra las norteamericanas.
Lo cierto es que Vilda, quien se hizo cargo de la selección femenina de Marruecos el 12 de octubre del 2023, intenta no ver el duelo ante España como algo personal, con sus palabras deja claro que se trata de un encuentro en el que vuelve a la carga contra la selección española.
Para ser exactos, el madrileño de 43 años dirigió durante ocho a la selección femenina absoluta de España, con la cual ganó la Copa del Mundo Femenina de Fútbol en 2023 y obtuvo varios logros individuales hasta que su relación con las jugadoras ibéricas se quebró. Tras varias polémicas y momentos de crisis, Vilda fue destituido el 5 de septiembre de 2023. Ahora, un año después, se vuelve a encontrar cara a cara con la Roja, si bien tampoco deja de lado que el proyecto que tiene entre manos seguirá su curso más allá del resultado.
"Nosotros estamos empezando un proyecto. Tenemos que ir paso a paso. Estoy muy orgulloso de mis jugadoras, tenemos que seguir adelante, volveremos a plantar cara, volveremos a competir, volveremos a darlo todo, es a lo que hemos venido aquí, a competir en el mundial", subraya.
Respecto al hecho de que todo el cuerpo técnico de la selección absoluta de Marruecos esté en Colombia, expresa que es para ayudar en un proyecto que, según el estratega, es un objetivo que está "cerca de conseguirse". Vilda indica además que se queda con el orgullo y la satisfacción de ver que las jugadoras lo han dado todo. "Aunque no hemos ganado se ha dado un paso grande, porque hemos competido contra equipos grandes del mundo".
Vilda tiene claro que el trabajo que está realizando en Marruecos no es algo que vaya a hacer que el fútbol femenino florezca de la noche al día. Por ello, tiene el objetivo de hacer entender al grupo que los resultados no pueden marcar el camino.
"Ahora no nos fijamos solamente en el resultado sino en el rendimiento de las jugadoras, es la primera vez que Marruecos viene a un mundial sub-20, son debutantes, es una nueva experiencia para ellas. Conocen lo que es el nivel, conocen cómo tienen que llegar de preparadas para seguir evolucionando y esto también les anima para seguir siendo profesionales", sentencia.