Con la mente puesta en la Eurocopa del próximo verano en Alemania, Luis de la Fuente sigue teniendo su futuro en el aire, por más que la Real Federación Española de Fútbol anunciara el pasado 22 de febrero su renovación hasta después del Mundial de 2026, con el fin de "dotar de estabilidad al equipo nacional".
En este sentido, ya se apuntó semanas atrás que el seleccionador era partidario de negociar un nuevo contrato con otros términos fiscales más ventajosos para él, más allá del sueldo, pues el actual vínculo que posee con la RFEF es el único de alta dirección dentro de su organigrama, al tratarse de un cargo de confianza del presidente.
Pero, más allá de ese aspecto, el escándalo generado con la imputación de Pedro Rocha en el ‘caso Brody’ y la apertura de un expediente por parte del Tribunal Administrativo del Deporte, extensible a toda la Comisión Gestora, ha puesto de manifiesto la incierta situación de De la Fuente a escasos meses de afrontar una cita del calibre de una Eurocopa.
Según informa el diario As, la Gestora presidida por Rocha tan sólo se limitó a ejercer una cláusula automática de renovación de forma unilateral, manteniendo las mismas condiciones que el técnico riojano tenía antes de hacerse cargo de la ‘Roja’.
En este contrato no existe ninguna mejora económica, como pretende el que fuese lateral izquierdo de Athletic Club y Sevilla FC, puesto que los dirigentes pensaron que una negociación para adecuar el sueldo del seleccionador podía exceder sus funciones como interinos tras la salida de Rubiales.
El nuevo contrato de De la Fuente, por tanto, es simplemente una ampliación del que ya tenía como empleado federativo del grupo técnico de selecciones, como apunta el citado diario. Pero la realidad es que dicho contrato no ha sido todavía firmado ni por el entrenador ni por la Federación, pese a haber transcurrido más de un mes y medio desde que se hiciera oficial la renovación.
De este modo, con la incierta situación que reina en el seno de la RFEF, lo único cierto en torno a la figura de De la Fuente es que acabará contrato el próximo 30 de junio, en plena disputa de una Eurocopa que tiene prevista su final para el día 14 de julio. Una situación sin duda caótica en la que no se atisba una solución cercana, dada la posibilidad de que tenga que intervenir la FIFA ante el desgobierno de la Federación.
Por su parte, De la Fuente siempre ha defendido que no tendrá problemas en llegar a un acuerdo, aunque obviamente quiere ver reconocido su ascenso desde la sub 21 con el consiguiente aumento de salario. Pero, de momento, no hay un interlocutor con el que poder negociar.