Ronaldo, adiós

No levanta cabeza el Valladolid y el descenso del equipo pucelano es una realidad que no cogerá por sorpresa a nadie en mayo, cuando echa el cierre LaLiga en Primera división. No será sólo un descenso en lo deportivo, sino que conllevará consigo muchos daños colaterales en lo social y en la propia ciudad.

El Real Valladolid, cabeza visible deportivamente hablando de la ciudad de Valladolid y de la Comunidad de Castilla y León, ha evidenciado una caída libre esta temporada que asusta a todos los vallisoletanos. Y no sólo en lo deportivo, sino también como institución. Colista de Primera división con los peores registros en décadas -tan sólo 16 puntos-, el conjunto vallisoletano acumula sus peores registros en la máxima categoría desde su fundación en 1928. Un proyecto fallido en el que todos miran hacia su propietario, Ronaldo Nazario, y su falta de compromiso con el club en los últimos tiempos.

El enfrentamiento en el banquillo entre dos de sus futbolistas, Luis Pérez y Juanmi Latasa, ha sido la punta del iceberg de un problema que evidencia la falta de liderazgo en la institución y en el vestuario, que es un auténtico polvorín a la deriva. El esperpéntico momento protagonizado por los jugadores ante miles de espectadores, con intento de agresión incluimos por parte del lateral derecho, no hace más que demostrar que el Real Valladolid es un juguete roto de su máximo accionista, un Ronaldo que en verano ya hizo el amago de irse y al que todos en Valladolid solicitan su adiós.

La gestión y el interés del brasileño sobre el equipo ha caído hacia la absoluta desidia. Y no es baladí, pues hoy por hoy demuestra que está al frente más por obligación que por dedicación. Sus pretensiones pasaban ahora por hacerse con al presidencia de la Confederación Brasileña de Fútbol, lo que ha dejado a un lado al Real Valladolid, destinado a una venta que, sin embargo, vuelve a enfriarse; como en verano.

Al ver frustradas sus opciones por hacerse con el fútbol de Brasil retiró sus candidatura y con ellos se diluyeron las opciones de venta. Una muestra más de una dudosa gestión que se mueve a impulsos y que ha resultado fallida tanto en Valladolid como en el Cruzeiro.

La grada del Nuevo Zorrilla no abandona al Valladolid

Una inestabilidad en el campo y en los despachos que no se ha visto traducida en la grada, donde la afición aún apoya al unísono a su equipo. Entradas superiores a 17.000 espectadores fortalecen al Nuevo Zorrilla, con un tope de abonados y más de 4.000 aficionados en lista de espera para hacerse socios. Las protestas por la gestión de Ronaldo se recrudecen, así como los cánticos y las pancartas con el lema ‘Ronaldo Go Home’ sin reacción aparente del brasileño.

Ya hay movimientos al respecto, con inversores interesados en un proyecto a la baja, con el Valladolid ya descendido, y con exfutbolistas blanquivioletas como caras visibles de algunos de esos proyectos. César Sánchez o Alberto Marcos son algunos de esos exjugadores que se suman a las propuestas de inversores mexicanos, egipcios o norteamericanos, tal y como informa Marca.

Sin embargo, desde las instituciones de la ciudad y de la comunidad se siembra la duda. Nadie acabe de tener claro que Ronaldo quiera vender al Valladolid en el momento actual, pues vale mucho menos que cuando lo compró. La afición, sin embargo, lo tiene claro: ‘Adiós, Ronaldo’.