Alavés
Valladolid
Era justo lo que necesitaban el Real Valladolid en general y Paulo Pezzolano en particular. La entidad pucelana arribaba a Mendizorroza tras ocho jornadas sin ganar y con el técnico uruguayo en la cuerda floja. Pues bien, ambos han salido a flote con un balsámico triunfo por 2-3 ante el Deportivo Alavés que llena de orgullo al entrenador.
"Estamos realmente muy contentos. Necesitábamos una victoria, hicimos un gran juego y no puedo estar más contento por los jugadores", comenta antes de hablar claro sobre lo ocurrido sobre el verde, donde sus chicos mostraron una fortaleza poco vista en anteriores ocasiones.
"Controlamos muy bien el juego. Sin pelota taponamos los espacios que ellos saben usar muy bien y a partir de ahí hicimos nuestro juego con la pelota. Hoy sabíamos que teníamos que tenerla menos para poder hacerles daño. En la segunda parte se desesperaron un poco en la búsqueda del gol, dejaron espacios y lo aprovechamos", recalca.
En cuanto a las jugadas polémicas del partido –se señalaron hasta dos penaltis–, entiende que el colegiado estuvo acertado en todo momento. "Los dos fueron penalti. Lo de Conechny es una jugada totalmente diferente. Siempre respeto lo que deciden los colegiados. Voy a muerte con ellos". subraya.
La felicidad de Pezzolano va incluso más allá del triunfo, ya que el técnico entiende que este es una recompensa merecida por sus chicos, ya que en anteriores ocasiones solo les faltó acertar con la portería rival.
"Estoy muy contento por los jugadores. En los partidos anteriores no lográbamos resultados porque simplemente no convertíamos las ocasiones. Además, había detalles que terminaban en goles en contra. Estoy muy contento por ello, ya que los chicos venían haciendo muy buenos partidos", comenta.
Si bien Pezzolano admite que hay euforia en el vestuario por el triunfo, de igual modo deja claro que cuanto antes deben volver a poner los pies en el suelo para estar centrados en el próximo rival, que será en casa el Villarreal CF. "Por supuesto que hemos sacado algo de bronca en el festejo, pero en realidad son tres puntos más. Hay que bajar la euforia, ya que aunque son tres puntos muy importantes, hay que seguir trabajando e ir a por el próximo rival", concluye.