Aitor Torvisco7 min lecturaA buen seguro, el mejor futbolista de este titubeante inicio de temporada en la Real Sociedad ha sido, con diferencia, Martín Zubimendi, un futbolista que no para de crecer y que es noticia permanente en todo el continente. Su gran momento de forma, unido a la grave lesión de rodilla de Rodri Hernández, no sólo otorga también un rol de titular en la selección campeona de la pasada Eurocopa, sino que también ha hecho que el nombre del pivote donostiarra sea señalado por los principales medios de comunicación de Inglaterra como el mejor candidato posible para paliar la grave pérdida del Manchester City en su centro del campo. Otra vez en el escapate, el '4' blanquiazul ya cerró la puerta a marcharse en el pasado mercado estival de fichajes y este miércoles ha roto su silencio para explicar que la decisión que tomó es irrevocable y no se plantea su salida en enero.
Zubimendi ha pasado por sala de prensa en la tarde de este miércoles, acompañando a Imanol Alguacil en la comparecencia oficial ante los medios en la previa del partido de este jueves contra el PSC Anderlecht, en la segunda jornada de la Fase de Grupos de la UEFA Europa League. Como cabía esperar, las ofertas que maneja desde hace años han copado mucho protagonismo. El FC Barcelona ya le tanteó hace dos años, con Xavi insistiendo en que no había mejor sustituto para Sergio Busquets. Los culés, el Arsenal FC o el FC Bayern de Múnich, entre otros, también se interesaron este pasado verano; pero fue el Liverpool FC quien más insistió para llevárselo hasta el punto de hacerle dudar. Finalmente, rechazó una jugosa propuesta económica para continuar en la Real Sociedad y no sólo no se arrepiente, sino que admite su incomodidad por el ruido que genera su posible traspaso.
El mediocentro de 25 años, con contrato en vigor hasta 2027 y con 60 millones de euros de cláusula de rescisión, ha hablado por primera vez sobre su agitado verano y la oferta del Liverpool: "Es verdad que no fueron unos días fáciles, pero estoy muy contento con la decisión que tomé. Fue una decisión tomada desde dentro y creo que me quedé en paz, porque pensé que era lo mejor. Mi filosofía es la de hacer en cada momento lo que me sale de dentro y hasta ahora siempre he decidido quedarme es verdad que hubo mucho ruido, momento incómodo, pero pensaba que lo mejor era quedarme aquí. No le doy más vueltas". "Podéis estar tranquilos en invierno", zanjó, despertando la sonrísa de Imanol.
Sin pronunciar al Manchester City, Zubimendi sí ha reconocido que le genera malestar ser noticia por este tipo de rumores cuando a su equipo le estaban yendo muy mal las cosas y estaba en la parte baja de la clasificación de LaLiga. "Como en cada mercado, siempre van a salir cosas. Y esas cosas te las tienes que llevar. Es verdad que en mi caso se me hizo incómodo, por el ruido más que nada; pero conseguí aislarme de todo, pensar bien mis ideas, y llegué a la conclusión de que que era la decisión correcta. Mi decisión fue desde dentro y no me importa el inicio de Liga. Este equipo tiene mucho potencial", remarcó, afianzando su compromiso.
El calendario no da tregua con maratones de partidos entre LaLiga y la Europa League en medio de los parones de selecciones, períodos en los que Zubimendi tampoco puede descansar ya que es fijo con España. Además, es un fijo para Imanol Alguacil y ha jugado en los nueve partidos oficiales de esta 24/25, ocho de ellos como titular y completando los 90 minutos. Justo en el primer partido del curso fue su única suplencia, pero disputó toda la segunda parte y encima marcó el gol de su equipo. De momento, no necesita descansar, todo lo contrario: "Bendito problema, ése de de estar disponible siempre, eso te da tener más opciones de jugar. Yo siempre digo que estoy bien, disponible, ahora mismo no hay que pensar en otra cosa. Yo estoy preparado para lo que sea. Me siento bien, en forma. Lo que decida Imanol será bienvenido".
La Real Sociedad regresa a la Europa League después de participar el curso pasado en la Champions. Son ya cinco cursos seguidos en competición continental, pulverizando la mejor dinámica en la historia del club, y esta edición tiene el aliciente de que la final se juega en Bilbao, muy cerquita de casa y en el estadio del eterno rival. "Decir 'Vamos a ganar la Europa League' es algo que se dice muy fácil pero, siendo realista, este equipo aún no lo ha demostrado poder llegar a la final, porque siempre hemos caído en las primeras eliminatorias. Así que el objetivo es mejorar lo hecho hasta ahora y ya veremos si podemos llegar más lejos. Recibimos esta competición con muchas ganas, es un torneo de alto nivel", manifestó, rechazando cualquier presión innecesaria que les distraiga del día a día. "Queremos demostrar que somos un equipo fuerte en casa", añadió, en busca de la segunda victoria seguida tras el 3-0 ante el Valencia y antes de recibir el domingo al Atlético de Madrid en la jornada 9 de LaLiga.