La situación de Robert Navarro es una de las que debe solucionar la Real Sociedad este mismo verano. El mediapunta catalán ha regresado a San Sebastián después de una notable temporada cedido en el Cádiz y con tan sólo un año de contrato por delante como txuri urdin, su futuro es una incógnita. La Real Sociedad quiere contar con él, así lo aseguraba el propio Roberto Olabe nada más finalizar la pasada temporada. "Estamos haciéndole ver que le estamos intentando renovar, que queremos que siga con nosotros. Ha manifestado las cosas que hace bien, tiene mucho talento, y en un contexto poco sencillo. Le ha venido muy bien. Se incorpora al primer equipo", zanjaba.
Sin embargo, el tiempo pasaba y comenzaban a sonar rumores de algunos equipos interesados en el atacante barcelonés, como el del propio Alavés, que buscaba repetir la fórmula con Gorosabel, pero en la Real Sociedad existía el miedo de que, como el préstamo del lateral de Mondragón, este acabara llegando libre el próximo verano al Athletic Club, que también anda tras los pasos del catalán, de ahí que la Real Sociedad, de momento, no contemple una cesión sin una previa renovación de su contrato.
Y eso es lo que precisamente está intentando la directiva guipuzcoana. Según apunta Mundo Deportivo, Robert Navarro tenía una oferta de renovación de cuatro temporadas encima de la mesa desde comienzos de la pasada temporada pero el futbolista y sus agentes la habrían rechazado pues albergan serias dudas del papel que tendría con Imanol Alguacil.
La Real insiste en que la temporada será larga y habrá oportunidades para todos pero si finalmente no hay acuerdo para su renovación, la intención de la Real será entonces la de buscar un traspaso con el que el menos recuperar parte de la inversión realizada por él en el verano de 2019, cuando pagó seis millones de euros al Mónaco. El jugador alberga dudas de que vaya a ser importante para Imanol Alguacil pese a los intentos de Roberto Olabe para renovarlo. En las próximas semanas debe encontrarse una solución bien sea para seguir o para salir.
Robert Navarro se formó en las canteras de Osasuna y el FC Barcelona antes de que el Mónaco en edad juvenil para su cantera. En el Principado tan sólo estuvo una temporada hasta que llegó la Real Sociedad y apostó fuertemente por él pagando seis millones de euros para integrarlo en su filial. Sin embargo, su etapa en San Sebastián tampoco ha sido fácil, hasta el punto de tener que salir cedido el pasado verano al Cádiz, donde ha sido uno de los jugadores que más ha destacado.