A tres días de que la Real Sociedad reciba en su feudo al Real Madrid, el meta de Cascante Álex Remiro, confía en sumar la segunda victoria del curso, y la primera ante la afición, en un duelo de alto voltaje. "Es verdad que no hemos estado reconocibles, que hemos tenido momentos de falta de contundencia, de lo que hemos hablado y estamos corrigiendo. Toca aplicarnos, entrenar, exigirnos, sacar nuestra mejor versión y a por los retos que nos vienen ahora seguidos", ha hecho autocrítica en la primera respuesta.
Aunque no ha empezado la temporada de la mejor manera, el cancerbero realista ha asegurado que "es una de las temporadas que más nos está costando sacar partidos en el inicio, pero el año pasado también. Es una temporada de apretarnos, de los que más años llevamos hacer que los jóvenes estén tranquilos, que disfruten, que se aprieten entrenando para que se atrevan a hacer cosas con el balón, que vayan a fuertes a los duelos, les tenemos que apretar para ello. Estoy seguro de que, con la plantilla que tenemos, si hacemos las cosas como podemos y confiamos, este inicio se quedará como el del año pasado, como trámite malo, un aprendizaje para hacernos fuertes como equipo para dar nuestra mejor versión", indicó.
Sobre la lesión de Oyarzabal ha apuntado que "no sé hasta donde puedo decir, pero ya le conocemos a Mikel, va a hacer todo lo posible por estar cuanto antes y seguro que así es. Confiamos en eso, le necesitamos, porque es nuestro líder, nuestro capitán, vamos todos tras él y nos hace falta. ¡Ojalá que cuanto antes esté y vuelva tan bien como estaba!", confía en el capitán.
En relación al próximo choque ante los madridistas ha indicado que "es la mejor oportunidad de dar la vuelta a la situación, a las sensaciones, al rendimiento y conseguir los tres puntos sintiéndonos lo fuertes que por muchos momentos de estos cuatro partidos nos hemos sentido, también toda la temporada pasada. Yo lo veo como una oportunidad de hacer un gran partido y ganar".
Analizando al conjunto de Ancelotti, destacó que "es uno de los mejores rivales de Europa, por no decir el mejor, y todo el mundo se motiva. No debería ser así, pero la realidad es que lo es. En mi caso, he hecho buenos partidos, también malos. Tengo ganas, más de jugar yo bien, de volver a ganar por fin de nuevo en casa y devolverle a la gente el apoyo que nos da con una victoria".
Para ganar hay que "sacar nuestra mejor versión de la Real y a ver qué pasa. Si estamos en una gran versión de cada jugador, si estamos concentrados, nos atrevemos y nos identificamos con lo que éramos, vamos a competir por ganar contra todos los equipos. Es un partido en casa, queremos estar bien con y sin balón, hacer un buen fútbol y dar a la gente tres puntos".
Dice que hay motivos para pensar en una victoria. "Hay razones, hay 25 jugadores en la plantilla para dar argumentos de sobra para volver a esa versión. Somos los primeros que sabemos cuando estamos bien y mal, que sabemos que cuando estamos bien nos divertimos y, cuando no nos sale, nos duele y nos fastidia. Hay que buscar en el trabajo en Zubieta ese rendimiento. No estamos tan lejos", comentó.
Para finalizar, apuntó sobre la gran carga de partidos. "Me uno un poco a la línea de todos mis compañeros de profesión, jugadores, técnicos, y mucha gente de fútbol que opina que es una locura. La realidad es que es una locura. Es verdad que hay que ser conscientes del mundo en el que estamos, de lo que queremos, de lo ganamos, de lo que optamos y de dónde estamos siendo realistas, pero con un mínimo de descanso, de condiciones de los campos de fútbol, en los viajes y de todo".
Insistió en que "no pasa nada por decirlo. La realidad es que hoy en día jugamos muchos partidos con muy poco descanso, y con horarios que un día te benefician y al mes siguiente pasas de dormir en casa a pegarte un viaje y llegar con menos descanso que el rival. Siempre hay polémicas para todos los lados".