Álex Remiro, portero de la Real Sociedad, vive uno de los mejores momentos de su carrera deportiva. El cancerbero es titular indiscutible en un equipo que esta temporada jugará UEFA Champions League y ha comenzado la campaña a un nivel muy alto tal y como demuestran algunas paradas en los primeros cuatro encuentros de LaLiga. Álex Remiro es feliz en San Sebastián a donde llegó procedente de un Athletic Club que nunca terminó de confiar en sus cualidades lo que propició su marcha. Aprovechando una entrevista en DAZN, Álex Remiro ha rememorado aquellos días en los que se rompió su idilio con el Athletic Club al que ha criticado sin dudarlo.
Álex Remiro asegura en esta entrevista con DAZN que la venta de Kepa al Chelsea hizo que su situación cambiara por completo. Ese movimiento de mercado hizo que el Athletic Club quisiera renovarle al quedarle un año de contrato, pero las formas que emplearon, la directiva del presidente Josu Urrutia por entonces, no le gustaron nada.
"Cuando empezamos la pretemporada no tengo ninguna oferta de renovación porque a Kepa se le había renovado en enero, entonces, lo que el club me transmitió era: te queda un año de contrato, vas a ser segundo o tercer portero, no puedes salir cedido... vas a estar aquí. ¿Qué pasa? Que a Kepa, vienen, y se lo llevan. A mí me repercute en que vivimos una situación de: tienes que firmar esto para poder jugar, si no, te vas a ir a la grada", desveló el portero.
Álex Remiro continuó y denunció que no estuvo cómodo en esa situación. "Claro, después de saber que no contaban conmigo, que me medio obligaban a firmar un contrato que no había leído ni yo ni mis representantes, con el entrenador delante... yo dije: Yo no quiero aguantar esto. Yo no sé lo que voy a firmar. Tengo 22 años... soy un niño, pero tonto no soy. Yo quiero ver lo que es esto. Claro, entonces dije: yo esto no lo voy a firmar. ¿Qué pasó? Que, eso, o lo firmaba, o no lo podía volver a ver. Así que dije: 'no. Yo me voy a casa, hablo con mi familia... yo tengo que hablar de esto'. Desde ahí, hasta final de año, ni una conversación. Yo iba a entrenar, intentaba ser el mejor Álex que podía ser. Nunca dije nada malo, me llevaba bien con todos mis compañeros, no di un problema a nadie... pero yo sabía ya lo que me iba a pasar".
Así pues se gestó la marcha de Álex Remiro según su versión de los hechos. Eso ocurrió en 2019. En aquel verano, el portero de Cascante acabó contrato con el Athletic Club y se terminó marchando a la Real Sociedad con la que fichó como agente libre.