Hay decisiones que no se comprenden, otras muchas que sólo se entienden desde el punto de vista económico y que causan decepción en los aficionados al fútbol, al menos a varios de ellos, que nunca entenderán cómo un gran futbolista, con años de carrera deportiva al máximo nivel puede tomar la decisión de marcharse a un equipo sin aspiraciones reales y lejos del primer nivel mundial. Es justo lo que ha ocurrido con Rafinha Alcántara que ha tomado la decisión de dejar Europa, y el PSG, para dejarse seducir por el dinero ya que se marcha a Qatar donde ha sido presentado por el Al-Arabi SC como nuevo futbolista para las dos próximas temporadas.
Rafinha Alcántara ya es jugador del Al-Arabi SC de Qatar con quien firma para los dos siguientes cursos futbolísticos después de que la entidad qatarí y el Paris Saint-Germain llegaran aun acuerdo para el traspaso del centrocampista hispano-brasileño por una cantidad gratuita en el que el nuevo club de Rafinha se hace cargo del salario del futbolista, de año que le quedaba de contrato el cual finalizaba en el verano de 2023, que era el gran objetivo de la dirección deportiva de Luis Campos y del entrenador Christophe Galtier quien le había comunicado a Rafinha que no entraba en sus planes deportivos, siendo señalado como uno de los descartes desde el principio del mercado de fichajes.
Por eso mismo, la Real Sociedad siempre ha estado muy pendiente de un Rafinha que dejó buen sabor de boca durante su final de temporada 2021/2022. El hispano-brasileño se convirtió en un titular indiscutible en el once inicial de Imanol Alguacil, siendo uno de los pilares fundamentales para que la Real Sociedad acabara en sexta posición y repitiera clasificación para la UEFA Europa League.
A pesar de ello, la Real Sociedad no se volvió loca y viendo que las exigencias del PSG eran desorbitadas al inicio, apostó primero por fichar a Mohamed-Ali Cho, del Angers, posteriormente desembolsó una gran cantidad de dinero por Brais Méndez, del RC Celta, y finalmente fichó a Take Kubo.
Así, aunque se quedara sin espacio en la Real Sociedad, Rafinha Alcántara demostró a sus 29 años que estaba para jugar en un gran equipo europeo y de LaLiga, pero se marcha a Qatar, a por el dinero, lo que para muchos será decepcionante. Algunos de ellos se encontrarán en Vigo donde soñaban con el regreso del hispano-brasileño al RC Celta, pero la conexión Luis Campos, esta vez, no funcionó.