Fernando Sanz, quien fuera presidente del Málaga durante años, también fue jugador del Real Madrid. El exfutbolista, quien militó desde 1995 hasta 1999 en el conjunto de la capital de España, ha querido analizar lo que fue su etapa en el equipo que disputa sus encuentros en el Santiago Bernabéu, dejando claro que su periplo en la escuadra merengue, no fue, ni de lejos, agradable. "La gente se cebaba conmigo", expresaba el que, actualmente, forma parte del Comité Ejecutivo del Mundial 2030.
En una entrevista concedida a The Objective, consideraba que pasar por la entidad de Chamartín "me perjudicó, y mucho. Por muchas cosas". "Las envidias que tuve que sufrir esos años... Pasaron infinidad de cosas. Yo trabajé como nadie, cada día que acudía a la Ciudad Deportiva para ascender al primer equipo. Pero siempre con el sambenito y con la espada de Damocles que me colocaron. Quiero recordar que soy uno de los pocos futbolistas que pasé por todas las categorías inferiores del club hasta llegar al primer equipo y en todas ellas fui capitán", valoraba.
"No sé si fue acoso, pero era todos los días del año. Tanto si jugábamos en casa como fuera. Y todo por el hecho de ser mi padre el presidente del club. Se me mataba incluso sin jugar, tanto por parte de la prensa como de la gente. En aquella época había muchos prejuicios, pero lo que yo era capaz de hacer quedó demostrado cuando me fui a jugar al Málaga", consideraba.
"Son tantos, la verdad, que es muy difícil poder decirte uno. En los partidos en el Santiago Bernabéu recuerdo cómo se cebaban conmigo. Y también en los entrenamientos. Entonces, el público podía entrar a vernos a la Ciudad Deportiva. Y, cada día, entre 5.000 y 6.000 personas te decían de todo a solo cinco metros de ti. Y tú sin poder hacer nada, al contrario. Porque el público era soberano y siempre tenía razón".
No se quedó ahí, ya que sobre su salida, apuntaba a que "cuando me marché, me quedaban cuatro años de contrato con el Real Madrid, pero me fui por todo lo que estaba sufriendo".
"Rodri lo mereció más el año pasado. Está claro que se trata de un jugador estratosférico y además es español. Pero Vinicius se lo merecía, como también Dani Carvajal. Creo que lo mejor que puede hacer France Football para acabar con esta polémica es hacer oficial todas las votaciones de los periodistas", consideró, sobre todo lo sucedido en la gala del Balón de Oro, cuando Vinicius, tras conocer que no iba a ganar este premio, decidió no acudir, al igual que el Real Madrid, para quien este reconocimiento ya no existe.