El partidazo de anoche entre el Real Madrid y el Bayern de Múnich tuvo muchas imágenes y momentos para el recuerdo: los goles de Joselu, los jugadores blancos que estaban en el banquillo corriendo eufóricos por la banda tras la remontada…
Sin embargo, hay una escena que podría quedar grabada en la memoria colectiva del madridismo. Y es que, tras el final del encuentro, Toni Kroos se quedó mirando el césped y las gradas vacías del estadio Santiago Bernabéu acompañado por su familia. Este gesto ha levantado numerosas especulaciones sobre un posible adiós del alemán al fútbol de clubes, una decisión que no ha sido confirmada, pero que genera incertidumbre entre los hinchas madridistas.
Crecen las especulaciones sobre su futuro
El centrocampista germano, que atesora una carrera llena de éxitos con el Real Madrid, termina contrato el próximo 30 de junio, pero hasta el momento no ha se ha pronunciado sobre su futuro. Lo único cierto es que volverá a la selección alemana para participar en el Eurocopa de este verano, que se disputa en su país.
A pesar de la presión del club y sus compañeros para que siga en el equipo blanco una temporada más, Kroos sigue sin dar la más mínima pista sobre su futuro. Cuando se le ha preguntado por esta cuestión ha manifestado su deseo de “irse en lo más alto”. Hasta el momento, el paso de los años parece no hacer mella en el centrocampista.
Las consecuencias de su marcha
El posible adiós de Toni Kroos no solo sería un golpe emocional para el madridismo, sino también supondría un problema para Carlo Ancelotti, que no cuenta en la plantilla con un jugador de sus características. Su habilidad para controlar el ritmo del juego y su técnica y precisión en los pases son cualidades que no se reemplazan fácilmente. De hacerse oficial su marcha, el Real Madrid tendría que buscar un sucesor que pueda llenar el vacío que dejaría el alemán.
Por el momento, los aficionados merengues y los analistas deportivos solo pueden especular con lo que hará Kroos cuando acabe la presente temporada con el Real Madrid. Muchos han interpretado la decisión de volver a jugar con Alemania tras varios años de ausencia como una señal de que su adiós al fútbol es inminente, pero no hay nada seguro.
Los madridistas esperan ansiosos la decisión final de un futbolista que ha sido capital en los éxitos del equipo en la última década. Si decide seguir un año más, tanto el club como los seguidores recibirán con alivio la noticia. Pero si decide colgar las botas, su marcha se verá como el broche de oro a una etapa dorada tanto para él como para el Real Madrid.