Enfrentarse al Real Madrid es todo un reto, si es en una final más aún. El Atalanta lo hará el próximo miércoles en Varsovia (Polonia) para jugar la final de la Supercopa de Europa, dónde se enfrentarán los campeones de la UEFA Europa League y de la UEFA Champions League del curso pasado.
El año pasado los de Bergamo terminaron de manera fabulosa la temporada. En la final de la Europa League ante el "invencible" Bayer Leverkusen de Xabi Alonso ganaron por 3-0 con un hat-trick de Lookman. Además de conseguir su primer torneo internacional, quedaron en cuarta posición y el año que viene jugarán la Champions League.
Aunque parece que este verano las cosas se están torciendo. En el último encuentro amistoso de la pretemporada del conjunto de Gian Piero Giasperini, perdieron ante el recién ascendido Parma por goleada: 4-1.
Por si los resultados no acompañaran, las cosas no mejoran de puertas del vestuario para dentro. Una de sus estrellas, Koopmeiners quiere jugar para la Juventus y el jugador holandés se ha rebelado. Por lo que no entrena para el Atalanta ni tiene previsto jugar a corto plazo. Es decir, está forzando su salida a Turín.
El centrocampista holandés, el año pasado anotó 15 goles y repartió siete asistencias. De todos modos, Giasperini que ha pasado muchos años en los banquillos, ha comunicado que el club se siente chantajeado. Por lo que hay lío a la vista, a una semana de jugar una final y contra el Real Madrid.
Por si fuera poco y como dicen que las malas noticias no llegan solas, las lesiones tampoco están acompañando al conjunto italiano. Scalvini se lesionó hace unas semanas y no estará en la final de la Supercopa de Europa el miércoles. Además, el delantero italiano Scamacca hace unos días se rompió el ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda. Por lo que tendrá que operarse y por lo que es imposible que este para la final tampoco. De hecho, el delantero centro se perderá gran parte de la temporada.