Alejandro Sáez6 min lecturaEl idilio del Real Madrid y Kylian Mbappé viene de largo, prácticamente desde que tenía 13 años recibiera una carta para probar con los blancos. Así lo explicaba el propio Mbappé en The Player’s Tribune: “Mi padre recibió una llamada de alguien del Real Madrid, invitándome a venir a España para una sesión de entrenamientos durante las vacaciones. Fue un shock porque de hecho le dijeron a mi padre: ‘A Zidane le gustaría ver a tu hijo’”.
Tras ese contacto, la partes se distanciaron hasta que años más tarde Florentino volvió a la carga, aunque sin fortuna hasta el momento. En 2021, como el propio Mbappé ha reconocido, pidió formalmente un traslado del PSG a la capital de España, aunque nunca acabó de darse. El traspaso, sin embargo, tiene visos de forjarse el próximo verano, de cara a la 24/25. Una operación sustentada sobre cinco grandes claves.
A diferencia de 2022, cuando todo apuntaba (como ahora) que el delantero francés marcharía al Real Madrid, una llamada del presidente de Macron, presidente de Francia, lo alteró todo, motivando que la estrella más grande del país galo se quedara en el PSG. “Nunca imaginé que iba a hablar con el presidente sobre el futuro de mi carrera, así que es algo loco, realmente algo loco”, dijo Mbappé en The New York Times: “Me dijo: ‘Quiero que te quedes. No quiero que te vayas ahora. Eres muy importante para el país’”.
Obviamente, la estrategia estaba basada en la imagen de Francia de cara al Mundial de Qatar, en el que los galos llegaron a la final con un buen papel de Mbappé, aunque acabaron sucumbiendo ante la Argentina de Messi.
El Real Madrid cuenta, ahora sí, con el respaldo de Kylian Mbappé, que este verano vio cómo fue apartado de la dinámica del primer equipo como forma de presión para tratar de conseguir su renovación. Sin embargo, el delantero aguantó la situación y, finalmente, alcanzó un entendimiento con otras cuestiones económicas que le han devuelto al plantel de Luis Enrique, aunque sin renovar.
Pese a las presiones, Kylian Mbappé sigue a lo suyo en el PSG de Luis Enrique. Esta semana, sin ir más lejos, se estrenó en la Champions antes un Dortmund con el que vio portería, de penalti, sumando la primera victoria para los parisinos. En total, el de Bondy ya lleva en este inicio de temporada ocho tantos en cinco partidos oficiales.
Aunque con matices, pero en esta ocasión parece que el dinero no lo es todo para Mbappé. A diferencia de la vez anterior, cuando el internacional galo acabó sucumbiendo a la ‘jaula de oro’ que le ofrecía el qatarí Nasser Al-Khelaifi, propietario del PSG, este verano ha sucumbido a las presiones económicas para seguir fiel a su discurso de no renovar y poder salir el verano que viene como agente libre… y con destino al Real Madrid.
En primer lugar, rechazando una importantísima oferta de Arabia Saudí que contentaba las exigencias económicas de un PSG no dispuesto a dejarlo marchar libre. El Al Hilal saudí ofrecía 300 millones por el futbolista, quien percibía una ficha de 200 kilos por un año de contrato. El puente perfecto hacia el Santiago Bernabéu, salvo para Mbappé, que decidió rechazarlo y optar por seguir jugando al más alto nivel en Europa de la mano del PSG. Eso, además, le costó unos cien millones de euros firmados en base a cláusulas de fidelidad. La primera de ellas, de unos 40 kilos, la tendría que haber cobrado el pasado julio.
Ese gesto, lógicamente, sirvió para endulzar su relación con Al-Khelaifi, quien confiaba (y aún lo hace, en cierta manera) en renovarlo. Mbappé sigue a lo suyo, y la relación ha vuelto a saltar por los aires en ciertos momentos.
Con la mirada puesta en el próximo verano, y no en éste que ya ha pasado. Así ha trabajado el Real Madrid durante el pasado mercado estival, cuando el PSG estaba ‘obligándole’, prácticamente, a realizar un desembolso desmedido e innecesario, pudiendo firmar al crack francés a final de temporada como agente libre.
Firmar a Mbappé este verano hubiera supuesto un desembolso de 200 millones de euros, lo que impediría a los blancos haber pagado una prima similar a la pactada en 2022. Ahora, en enero, Kylian Mbappé tendrá la última oportunidad de firmar por el Real Madrid, olvidándose Florentino Pérez definitivamente de él si el internacional galo no se decide del todo.