Toda la concentración de Joselu Mato está puesta en volver a levantar un título con la selección española y en alargar su estancia en la Eurocopa 2024 hasta el próximo 14 de julio, para regresar de Alemania con el cuarto entorchado continental de la historia de la 'Roja'. Sería el broche perfecto a una temporada en la que ha vivido la insólita situación de levantar LaLiga, la UEFA Champions League y la Supercopa de España con el Real Madrid estando cedido por un club de Segunda división como es el recién ascendido RCD Espanyol, que este mismo jueves ha anunciado que el club blanco ha ejecutado la opción de compra y el ariete hispano-germano, noticia en las últimas horas por su posible marcha al fútbol árabe, ya es merengue a todos los efectos.
"El Real Madrid ha comunicado al RCD Espanyol que ejecuta la cláusula de compra por Joselu Mato, incluida en el acuerdo alcanzado hace un año entre ambos clubes. Por tanto, Joselu deja de ser jugador blanquiazul", informó el conjunto catalán en un comunicado oficial publiado en su página web, donde también le deseó "suerte en su nueva aventura profesional" al internacional español, poniendo así punto y final al tenso escenario que se avecinaba con los pericos reclamando que no podía comprometerse con ningún equipo sin negociar su salida de Cornellà, donde tenía contrato en vigor hasta el 30 de junio de 2025.
Las últimas informaciones apuntaban a que el punta de 34 años no seguiría finalmente en el Real Madrid y que ya le habría dado el 'Sí, quiero' al club qatarí del Al-Gharafa Sport Club, donde vería aumentados sus honorarios de manera más que significativa. Ya sea para facilitar este marcha al fútbol árabe o para darle otra oportunidad después de su gran rendimiento como revulsivo, lo único cierto y constatable a día de hoy es que el club presidido por Florentino Pérez ha abonado los 1,5 millones de euros correspondientes al precio fijado en la mencionada cláusula de compra de su contrato de préstamo.
Con el heroico doblete sobre la bocina anotado en el partido de vuelta de las semifinales de la Champions frente al FC Bayern de Múnich como punto álgido, Joselu ha firmado una campaña más que notable en la que ha sido el suplente perfecto: acató con intachable profesionalidad su rol secundario y rindió al máximo cuando Carlo Ancelotti estimó que le tocaba jugar, como prueban sus 18 goles y tres asistencias en 50 partidos oficiales con el Real Madrid, de que es seguidor confeso y canterano. El mediático fichaje de Kylian Mbappé y la llegada del joven Endrick, sumado a la continuidad de Rodrygo Goes y de Vinicius Junior le restan opciones de tener minutos y esa feroz competencia dibuja su futuro se antojaba más lejos que cerca de Madrid. No obstante, el movimiento desde los despachos del Santiago Bernabéu abren nuevos resquicios para su continuidad.