El Real Madrid está totalmente enfocado en la preparación de una temporada que puede ser vital para sus intereses. El cuadro de Concha Espina debe afrontar varios temas, entre los que destaca la resolución de un problema que se ha acentuado con el paso de las semanas. Este es el caso del centro de la zaga. Después de las salidas de Nacho y Rafa Marín, amén de la llegada de Leny Yoro, su gran objetivo, al Manchester United, el conjunto dirigido por Carlo Ancelotti necesita contar con un notable fondo de armario, ya que, en estos momentos, solo cuenta con tres futbolistas en esta demarcación: Antonio Rüdiger, Eder Militao y David Alaba, quien, por cierto, debe recuperarse de la grave lesión que sufrió el pasado curso. Por ello, es probable que su cantera, la conocida como ‘La Fábrica’, goce de más protagonismo en el curso que está por venir.
Durante esta pretemporada, destacan dos nombres en la convocatoria del técnico italiano, quien aspira a dar un notable paso al frente en la campaña que se avecina. Este es el caso de Raúl Asencio y Jacobo Ramón, quienes se desempeñan en el centro de la zaga. Tal y como apunta Mundo Deportivo, el primero es el que tiene más probabilidades de militar en la primera plantilla, en el caso de que Ancelotti tome la decisión de contar con él la próxima temporada.
Consolidado en el Real Madrid Castilla, sus buenas actuaciones habrían llamado la atención de la gran sorpresa del curso anterior en la máxima categoría de nuestro fútbol, el Girona. Eso sí, hay que estar pendientes de lo que pueda hacer en la gira de los Estados Unidos, ya que el entrenador del primer equipo le quiere ver antes de tomar cualquier decisión acerca de su futuro. Este es un punto fundamental para el joven jugador, quien quiere demostrarle a Carlo Ancelotti de lo que es capaz y de que se merece tener un hueco en la primera plantilla.
Ramón, por su parte, no lo tendrá nada fácil, ya que su situación es más compleja que la de su compañero. El central, que debutó en 2023 con el segundo equipo madridista, tiene una gran proyección, pero debe foguearse antes de plantearse dar el salto a la primera plantilla de la entidad de Concha Espina. Tras alternarse con el Castilla y el filial, lo que parece más probable es que siga cogiendo experiencia a las órdenes de Raúl González o de alguno de los conjuntos de las categorías inferiores del cuadro blanco antes de dar un salto que puede ser letal para cualquier canterano si no se calcula bien.