Rodrygo Goes se ha convertido en un comodín para Carlo Ancelotti, pues su versatilidad le permite desempeñarse en varias posiciones y el técnico lo ha aprovechado desde un primer momento. En un principio, lo empleó como revulsivo desde el banquillo, para después otorgarle un mayor protagonismo como extremo zurdo en una línea de ataque con tres hombres.
Sin embargo, la marcha de Benzema el pasado verano provocó que Carletto se replanteara seriamente el rol del canarinho y lo incluye como pieza vital en un nuevo sistema. El italiano se pasó al 4-4-2 y dejó la responsabilidad ofensiva a la pareja de brasileños: Rodrygo y Vinicius.
El de Osasco se ha adaptado a esa posición, pero la realidad es que no le gusta desempeñarse como referencia ofensiva, tal y como dejó claro durante la concentración de Brasil. De este modo, Rodrygo no se calló y le mandó un mensaje a Ancelotti sobre su inconformidad con esta demarcación en el Real Madrid, señalando que se siente más a gusto y más libre en el sistema de la selección brasileña. Y es que, además, Vinicius tiende a la izquierda, lo que centra en él el papel de punta de lanza.
"Siempre he dejado claro que tengo facilidad para jugar en las bandas, simplemente no me gusta jugar de '9', aunque en mi club tengo que hacerlo", señaló sin tapujos Rodrygo, que insistió en que, en este sentido, le cuidan más en la 'verdeamarelha': "En Brasil tengo más libertad para moverme".
No obstante, aunque prefiere desenvolverse como extremo, donde aprovecha más su llegada y desborde, Rodrygo asegura que asume la presión que conlleva acatar las responsabilidades goleadoras de Karim Benzema, consciente, claro está, de que no son comparables.
"Es una presión positiva saber que la gente confía en ti. Me veo así en este nuevo ciclo, y creo que puedo estar a la altura de esas expectativas que se han depositado sobre mí", sentenció el polivalente brasileño, al que, sin embargo, le está pasando factura jugar como delantero centro.
Sus números de cara a portería lo están acusando de manera considerable, pues, hasta la fecha, tan solo ha anotado un tanto y fue en el estreno liguero contra el Athletic. A partir de ahí, su aportación numérica en ataque se ha limitado a una asistencia en la cita contra Las Palmas en la jornada 7. En total, ha disputado 804 minutos repartidos en 11 partidos, por lo que su bagaje resulta muy pobre.