La decisión de Gil Manzano de no dar por válido el gol de Jude Bellingham en la última acción del partido entre el Valencia y el Real Madrid sigue dando mucho que hablar. En el seno del conjunto blanco nadie entiende al colegiado extremeño, desde Ancelotti hasta Vinicius, siendo tachado de “vergonzoso” por Tchouaméni. Pero las críticas también llegan desde fuera de la ‘casa blanca’.
Así, el ex árbitro internacional Mateu Lahoz, que desde su retirada acostumbra a no morderse la lengua en sus intervenciones mediáticas, no ha dudado en cargar duramente contra el que fue su compañero. Y no sólo por su decisión en esa polémica acción final, poniendo en tela de juicio su capacidad para representar al arbitraje español en la Eurocopa del próximo verano en Alemania.
"Los árbitros arbitran más de cara al viernes (cuando se produce la reunión del Comité Técnico de Árbitros) que de cara al fútbol. Si seguimos así haremos mucho daño al fútbol. Intentan seguir unas directrices y es preocupante que alguien que lleve 11 años y que va a ser nuestro representante en la próxima Eurocopa... Es un error sistemático. Es una cuestión de concepto total. El 'timing' en la primera parte también fue horroroso", aseguró el valenciano en el programa Tiempo de Juego de la Cadena Cope.
“Para mí es de desconocimiento del juego", añadió Mateu al valorar a la actuación de Gil Manzano, que aprovecho la situación para lanzar también un dardo a las altas esferas del estamento arbitral, con Medina Cantalejo a la cabeza. "Son situaciones que... lo que pasa es que tenemos demasiado ego. Hay muchas ganas de pitar para los viernes. Si no llega a pasar esta calamidad, desde el CTA hubiesen dicho que la inteligencia arbitral hubiese sido muy buena", señaló.
En cuando a la acción de la que tanto se queja el Real Madrid, el valenciano fue claro. En su opinión, el tanto de Bellingham que habría significado 2-3 debió subir al marcador, aunque desde el Valencia defienden que en el momento previo a sacar el córner ya avisó a los jugadores de uno y otro equipo que no dejaría una segunda jugada.
"Me preocupa que un árbitro de 11 años de experiencia tenga ese error tan grande. Hay demasiado ego", insistió, aclarando que en ningún momento el extremo debería haber realizado esa indicación a los futbolistas "Decir que es la última jugada...el reglamento solo te lo dicen para los penaltis fuera de tiempo, no para los córners. Si no hubiese hecho eso, nada hubiera pasado, la liebre no hubiera aparecido".