Alberto Gálvez3 min lecturaEl Rayo Vallecano va perdiendo fuerza con el paso de las jornadas y son muchos los que ya empiezan a sacar a lupa para encontrar el problema. Tras llevar dos meses sin ganar en el campeonato liguero (desde el pasado 22 de octubre ante Las Palmas 0-1), la nueva derrota sufrida ayer ante el Valencia, y en Vallecas, dejó algunas inquietudes entre la parroquia franjirroja.
Y a todas ellas trató de responder el técnico andaluz en la rueda de prensa post partido. Pero en la resaca del partido todavía son muchos los que están cuestionando sus decisiones durante el partido de ayer. Sobre todo, una, la de la participación de Álvaro García.
La suplencia del jugador utrerano sorprendió a todos porque es el máximo goleador del equipo (4 dianas) y no están los madrileños sobrados en dicha faceta. Hasta ayer, había sido titular en las diecisiete jornadas anteriores. Y, en la previa del partido, Francisco ya avisó del estado en el que se encontraban tanto el sevillano como su compañero Óscar Valentín: "Los dos terminaron con molestias el partido en Pamplona. Álvaro tuvo que pedir el cambio... Es verdad que está en la convocatoria pero entendemos que, si no es necesario, no tendrá minutos. No jugará, porque tenía un problema en el isquio que tememos que pueda ir a más”.
Sin embargo, el técnico almeriense, finalmente, terminó dándole entrada a Álvaro en el 81' en sustitución de Ratiu y el utrerano fue quien provocó la expulsión de Thierry en el minuto 90. Sin duda alguna, con dicha decisión, Francisco cometió dos errores. Aunque necesitara buscar la igualada en un partido que perdía desde el minuto 60, puso en riesgo la salud de su mejor activo ahora mismo. Y, por si fuera poco, con los acertados minutos que tuvo sobre el césped, ahora son muchos los que consideran que debía haberlo metido antes.
Y es que este es un error muy frecuente que cometen muchos entrenadores y al que los aficionados suelen responder con el ya clásico: "¡Si está lesionado para qué se lo lleva!". Ante el temor de cómo pueda ir el partido, se llevan a sus principales estrellas aunque estén tocadas para tenerlas en el banquillo y echar mano de ellas cuando sea estrictamente necesario. Y, al final, les puede la ambición y acaban metiéndolas pese a que tengan argumentos de sobra para darles descanso.
En esta ocasión, Francisco ejecutó un doble cambio, dándole entrada junto con Radamel Falcao, y Álvaro García no se resintió, pero de lo contrario le pudo haber costado muy caro sus minutos sobre el verde en un partido que, además, ya perdían.