Sevilla
Rayo
En-Nesyri sabe que el juego aéreo es su especialidad, su mayor virtud, para muchos la única reseñable. No es cierto, porque el marroquí ha deparado goles de todos los estilos, algunos tras un slalom propio del mejor de los equilibristas, corriendo al espacio para definir en el mano a mano o tirando de picardía en desmarques o anticipaciones. Pero también es innegable que en estas otras modalidades han aflorado sus grandes fallos en la definición, muy a su pesar en encuentros de envergadura, generando esa bipolaridad hacia su presencia. Pero este sábado volvió a relucir 'Aerolíneas Youssef' para rescatar desde los cielos un punto y, quién sabe, salvar a Mendilibar, como poco, de un parón preñado de debates sobre la pertinencia de su continuidad al frente del Sevilla FC, que no encontró el triunfo necesario para alejarse del pozo, pero que acaricia con desahogo un 2-2 que, visto lo visto en el primer tiempo, debe considerarse un botín enorme, especialmente por llegar en la última acción, ya en el b.
La primera mitad recordó tristemente a las de la primera vuelta de la 22/23, con un anfitrión plano, timorato y fallón que nunca logró hacerse con la iniciativa pese a actuar ante su público. Así, tras unos minutos de estudio recíproco, con la presión alta impidiendo la continuidad de ninguno, los madrileños olieron sangre y fueron a por su presa, frágil en las transiciones y a balón parado, así como previsible arriba con los balones colgados a En-Nesyri. En cuestión de diez minutos, los que transcurrieron entre el zurdazo a quemarropa de Isi Palazón que se sacó de encima como pudo Nyland al 0-2 de Álvaro García, el encuentro quedó aparentemente sentenciado o, al menos, encauzado. En una falta cerrada del 'pelado' extremo rayista, Gudelj peinó como pudo ante cuatro oponentes sin marca (igual que el remate anterior), rebotando el balón en el palo para que Óscar Valentín sólo tuviera que empujarla. El utrerano, por su parte, se lució con una vaselina en el mano a mano tras fenomenal maniobra de RDT.
Por su parte, Mendilibar señaló muy a su pesar a Fernando cambiándole a ocho del intermedio para dar entrada a Rakitic, cuando era Acuña, que tuvo la más clara eso sí en el alargue con un latigazo que abortó con muchos apuros abajo Dimitrievski, el que merecía salir por sus absurdas pérdidas (una de ellas, la del segundo gol) y su constante pique con todos, rivales y árbitros. El relevo del vasco terminó de enfurecer a una grada que castigaba ya desde hacía rato con pitos la nula capacidad de los suyos, aunque Juanlu había tenido una clara antes del 0-1 que estrelló en el lateral de la red y el propio Gudelj respondió de cabeza en un córner botado por Suso para que el remate se pasease por boca de gol. Un par de cruces salvadores de Pathé Ciss ante Óliver Torres y Sow completan el parco bagaje ofensivo de los blanquirrojos, muy nerviosos y con las ideas justas en la elaboración.
La reanudación arrancó con otro doble cambio lógico, pues a poco que hiciera Pedrosa iba a mejorar al enfuruñado Acuña, mientras que Ocampos revoluciona con su ímpetu a cualquiera. Y el mensaje caló rápido en las huestes sevillistas, porque se inició un asedio sobre el área foránea que obtuvo premio a los cinco minutos: En-Nesyri pide penalti por mano de Aridane, pero no se entretiene y la saca del área para que el balón acabe en Sow, listo para hacerse hueco en la frontal y ponerla imposible para el meta normacedonio, hasta el punto de que tocó en el palo antes de alojarse en la red. Un punto de inflexión claro que no se tradujo en el empate enseguida por que Lejeune puso el pie milagrosamente ante el zurdazo sutil de Suso en el área chica, tras un gran pase atrás desde la línea de fondo de Juanlu. Los de Francisco parecían tocados, sin la calma de la fase anterior para tocar y encontrar los espacios hacia Nyland.
Dimitrievski volvió a lucirse, cumplido el cuarto de hora, a disparos con la derecha de Lukébakio y Suso, a priori sus pies menos buenos, confirmando el volteo de las sensaciones y del juego en general. Un nuevo escenario que trató de revertir el míster madrileño con un par de sustituciones, pero, sobre todo, ordenando un estrechamiento de espacios a partir del adelantamiento de su defensa y pidiendo un esfuerzo a los suyos en la intensidad de la presión. Pero los blanquirrojos seguían metidos, con pierna dura en los cruces y la bombilla encendida en campo ajeno a la espera de un 2-2 redentor. El cansancio obró cierto equilibrio y benefició los intereses rayistas, asumiendo Mendilibar riesgos para terminar con un 1-4-4-2 y su equipo volcado, dejando opciones para las contras. Pedrosa, de hecho, evitó con su velocidad y anticipación que Isi Palazón, antes de marcharse, amarrase los tres puntos.
Rafa Mir, en el 94, tuvo una ocasión pintiparada, pero la echó fuera con toda la portería para él. Parecía la última, pero la insistencia tuvo premio, inicialmente merced a un rebote afortunado cuando Aridane achicaba agua y su despeje tropezó en la pierna de Lejeune para brindar en el 96 un córner más a Rakitic, que los pone de cine, y a En-Nesyri, deficiente en otros aspectos pero brillante cuando salta por encima de las defensas contrarias para cabecear con fiereza a la red. Lo vio todo el mundo en Qatar 2022 y están hartos de verlo en el Sánchez-Pizjuán. Lo siguiente, la decepción normal de un cuadro foráneo que se ahogó en plena orilla cuando ya celebraba el triunfo, así como el enfado monumental del anfitrión, que reclamaba el minuto extra que se suele conceder tras un tanto. Pero Díaz de Mera Escuderos no quería más líos y mandó a todos a la caseta, descontentos a medias y contentos también en un 50%.
FICHA TÉCNICA.-
Sevilla FC: Nyland; Juanlu (Jesús Navas 78'), Badé, Gudelj, Acuña (Pedrosa 46'); Fernando (Rakitic 37'), Sow; Suso (Rafa Mir 80'), Óliver Torres (Ocampos 46'), Lukébakio; y En-Nesyri.
Rayo Vallecano: Dimitrievski; Balliu, Aridane, Lejeune, 'Pacha' Espino; Pathé Ciss, Óscar Valentín (Kike Pérez 83'); Isi Palazón (De Frutos 83'), Trejo (Unai López 55'), Álvaro García (Pep Chavarría 83'); y De Tomás (Camello 69').
Árbitro: Díaz de Mera Escuderos (castellano-manchego), con el vasco De Burgos Bengoetxea en el VAR. Amarillas a los locales Gudelj, Sow, Suso, Jesús Navas y Joan Jordán (por protestar tras el pitido final), así como a los visitantes Aridane y Kike Pérez.
Goles: 0-1 (21') Óscar Valentín; 0-2 (27') Álvaro García; 1-2 (50') Sow; 2-2 (96') En-Nesyri.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la jornada 9ª de LaLiga EA Sports, disputado en el Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán de Sevilla ante 35.817 espectadores, con 204 rayistas en las gradas, según las cifras oficiales.