El Real Madrid sigue cocinando a fuego lento el fichaje de Gabri Veiga. Conocido hace tiempo el interés de los blancos en el talentoso jugador del Celta de Vigo, parece que los blancos han tomado definitivamente cartas en el asunto para que la perla gallega no se les escape.
Con un precio de 40 millones de euros –es lo que marcha su cláusula de rescisión–, para el Madrid no es un problema hacerse cargo de la misma, pero sí lo es el hecho de que otros muchos equipos puedan pagarla y, de paso, poner sobre la mesa un mejor contrato para Veiga. Los merengues, lejos de querer convertir la llegada del medio en una subasta, prefieren convencerle por otros caminos que hagan al joven de 20 años estar seguro de su decisión.
Así las cosas, recientemente hemos escuchado a Carlo Ancelotti señalar que le gusta Veiga; así de sencillo y así de importante. Si el entorno del jugador gallego expresó hace tiempo que éste necesitaba saber que tendría sitio para crecer en su nuevo club, en el Madrid se han encargado de dejarle claro, por medio de su entrenador, que sin duda se cuenta con él. Se trata de un gran paso, pero no del único que van a dar los de la Castellana.
Aunque no se trate de una reunión oficial de cara a cerrar el fichaje de Veiga, hoy mismo se han reunido ambas directivas, con los presidentes Florentino Pérez y Carlos Mouriño a la cabeza de las mismas, para celebrar la clásica comida previa al partido que enfrenta a Madrid y Celta esta noche en el estadio Santiago Bernabéu.
A tal encuentro también han asistido dos miembros del consejo de administración de los vigueses, los vicepresidentes Pedro Posada y Ricardo Barros, acompañando así al máximo accionista del club en una reunión que tuvo lugar en el restaurante Zalacaín, emplazamiento elegido habitualmente por la directiva del conjunto madridista.
Obviamente no ha trascendido qué han hablado en privado, pero no es descabellado pensar que el nombre de Gabri Veiga haya salido a relucir. Hace semanas diversos medios señalaron que el joven jugador del Celta es el principal objetivo merengue de cara al mercado de fichajes de verano, algo que choca con las palabras pronunciadas recientemente por Carlos Mouriño, quien aseguraba que la entidad blanca no se había dirigido a ellos para preguntar por el jugador. Puede que ese acercamiento se haya producido hoy mismo. Lo dicho, el Real Madrid sigue cocinando a fuego lento el fichaje de Gabri Veiga.