Real Sociedad 2-1 Sevilla: Sin gasolina, pero con orgullo y responsabilidad

El Sevilla FC se despide de la temporada 22/23 con una derrota inocua (2-1), aunque con la convicción de que no regaló el partido ni mucho menos a una Real Sociedad que no se jugaba nada, pero que concurrió con más descanso. La responsabilidad por la posibilidad de influir en empates o combinaciones que dirimieran el representante español en la Conference League sobrevoló un duelo condicionado por la final de la Europa League, que engrosa por séptima vez las vitrinas del Ramón Sánchez-Pizjuán, y las posteriores celebraciones y visitas institucionales. No pudo preparar José Luis Mendilibar de la mejor manera la cita, si bien los deberes estaban hechos y tocaba un cierre digno. Lo propició Dmitrovic, sobrio para evitar males mayores, pero la reacción en la segunda mitad, con ocasiones al principio y tanto postrero de Lamela, no sirvió para sumar en el epílogo. Para entonces ya habían puesto distancia Brais y Cho.

De inicio, las secuelas lógicas de la final y los posteriores festejos se hicieron notar en el ritmo visitante. Incluso, Montiel tuvo que retirarse muy pronto por lesión, forzando el concurso de Navas, uno de los siete cambios que había procurado el de Zaldívar para repartir cargas. Por su parte, Imanol apenas rotó, lo que se tradujo en un asedio continuo de los realistas sobre la meta de un inspirado Dmitrovic, presto para evitar males mayores ante Sorloth y Barrenetxea. Muchas ganas exhibía Brais Méndez, al pudo hacerle penalti el 'Cachete' antes de marcharse con una dolencia muscular y que fue ajustando poco a poco el punto de mira. El ex del Celta acarició el palo izquierdo desde la frontal, para mandarla al fondo de las mallas antes de la media hora en una acción desafortunada de Gudelj y el palaciego que habilitó a 'Barrene', entretenido primero aunque certero en la asistencia posterior.

Por parte blanquirrojo, tímidas escaramuzas de un animado Rafa Mir y un voluntarioso 'Papu' Gómez a la espalda de Jon Pacheco, si bien Remiro resolvió sin mayores problemas. Repetía titularidad en LaLiga Manu Bueno, un mediocentro con habilidades defensivas y organizativas muy interesantes, al tiempo que se estrenaba Hormigo por la sanción de Acuña, las molestias de Rekik y lo justo que llegaba Alex Telles, pasándolo peor el lateral zurdo de la cantera por la pujanza de Take Kubo, que está en un envidiable momento de forma y que tiene mucha culpa de que los donostiarras se hayan clasificado con cierta holgura para la Champions League, competición que compartirán con su rival este domingo y otros tres compatriotas. No deparó casi nada reseñable más este primer periodo, sin historia ni apenas trascendencia, en el que el mayor descanso albiazul marcó la diferencia.

Dio un paso al frente el Sevilla en la reanudación, no tanto por los cambios (Nianzou y Telles a escena) como por la actitud, hasta el punto de que bien pudo voltear el marcador por medio de Óliver Torres, que estrelló su tiro en el poste, así como por los intentos lejano de Manu Bueno y cercano de Badé, estos dos últimos bien resueltos por Remiro. Un aviso a navegantes que obligó a los anfitriones a aumentar la intensidad para recuperar la iniciativa, aunque el duelo, definitivamente, se había abierto para volverse impredecible. Las transiciones en forma de intercambio de golpes eran mortales de necesidad, especialmente las albiazules. Perdonó Kubo y salvó Dmitrovic ante Sorloth, que se redimió a continuación habilitando al recién ingresado Cho, que sorprendió entre los centrales, llegando desde atrás, para ponerla junto al palo, imposible para el meta serbio.

No quiso el cuadro de Mendilibar que esa acción diera carpetazo al encuentro, lo que consiguió por medio de Lamela, certero al cazar un gran pase de Suso para aguantar el forcejeo con un rival y cruzar al palo contrario. Se revisó la acción en el VAR por una posible falta previa de Nianzou a Carlos Fernández, aunque el 2-1 subió al marcador, todo lo contrario que el disparo a quemarropa de Jon Pacheco, anulado por una carga ilegal del guzmareño sobre Navas en el arranque de la jugada. Ya no hubo tiempo para más, dando por bueno de alguna manera ambos el esfuerzo y el resultado, que no se cobra víctimas y que no empaña ni por asomo la soberbia segunda vuelta nervionense.

FICHA TÉCNICA.-

Real Sociedad: Álex Remiro; Gorosabel, Zubeldia, Jon Pacheco, Diego Rico; Zubimendi (Guevara 62'), Barrenetxea (Mikel Merino 62'), Illarramendi (Oyarzabal 62'), Brais Méndez; Take Kubo (Cho 72') y Sorloth (Carlos Fernández 75').

Sevilla FC: Dmitrovic; Montiel (Jesús Navas 9'), Badé, Gudelj (Nianzou 46'), Hormigo (Alex Telles 46'); Manu Bueno (Suso 60'), Pape Gueye; Lamela, Óliver Torres, 'Papu' Gómez ('Tecatito' Corona 69'); y Rafa Mir.

Árbitro: Del Cerro Grande (madrileño), con su paisano Pizarro Gómez en el VAR. Amonestó solamente al visitante Óliver Torres.

Goles: 1-0 (27') Brais Méndez; 2-0 (73') Cho; 2-1 (77') Lamela.

Incidencias: Encuentro correspondiente a la 38ª y última jornada de LaLiga, disputado en el Estadio Anoeta de San Sebastián ante 35.065 espectadores, con presencia de aficionados sevillistas en las gradas.