La Policía detiene a 39 ultras implicados en una pelea antes de un Betis - Osasuna

La pelea multitudinaria entre aficionados del Betis y Osasuna el pasado 29 de octubre se salda con la detención de 39 personas implicadas en los hechos

La Policía detiene a 39 ultras implicados en una pelea antes de un Betis - Osasuna
Imágenes del enfrentamiento - X
Manuel PedreroManuel Pedrero 3 min lectura

Un total de 39 personas han sido detenidas por la Policía Nacional por participar supuestamente en una reyerta que tuvo lugar el pasado 29 de octubre en Sevilla, en la previa de un partido de LaLiga EA Sports que enfrentaba a Real Betis y CA Osasuna en el Estadio Benito Villamarín. La reyerta se produjo en la mañana del citado día y a escasos metros del estadio verdiblanco. Al menos se registró un herido, que perdió un diente y sufrió una herida sangrante en una de las cejas.

Fuentes de la investigación han señalado a la agencia EFE que el macrodispositivo policial ha tenido lugar esta madrugada en las ciudades de Sevilla, Pamplona y Madrid con el objetivo de detener a las personas implicadas en la pelea.

No se descartan más detenciones

El operativo sigue abierto y en marcha y no se descartan más detenciones a lo largo del día. La investigación la lleva a cabo los agentes de la Comisaría General de Información, grupo especializado en conflictos violentos relacionados con el deporte. Y cuentan con la colaboración de las brigadas provinciales de Madrid, Andalucía y Navarra.

El episodio conflictivo tuvo lugar la mañana del domingo 29 de octubre en los aledaños del Estadio Benito Villamarín, en la previa de un partido de Liga entre el Real Betis y CA Osasuna correspondiente a la jornada 11 del campeonato. Los efectivos de la Policía que patrullaban el lugar se alertaron por la presencia de un grupo con estética ultra (vestidos en su mayoría de color negro) que guardaban relación con el conjunto rojillo por los cánticos y lemas que entonaban. También informó la Policía al día siguiente que por esa zona solían frecuentar aficionados radicales del Betis.

Muchos de estos ultras iban equipados con pasamontañas para ocultar el rostro y portaban en el momento de la reyerta con palos y demás objetos contundentes para emplear y usar en la pelea. La presencia de la Policía, que tuvo que pedir refuerzos, redujo el afán de los individuos y evitaron que el conflicto llegara a mayores. Con la llegada de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, los grupos abandonaron los hechos y se incautaron palos de madera, barras metálicas, un cohete e incluso barras de futbolín utilizadas durante la reyerta.

El enfrentamiento se saldó con al menos un herido que perdió un diente y presentó una herida sangrante en una de las cejas.