Luis Rubiales parece no salir de una cuando se ve metido en otra. Mientras lidia con el Caso Negreira, del cual supimos tenía constancia el presidente de la Real Federación Española de Fútbol nueve meses antes de que saltara a la luz pública, ahora debe hacer frente a una nueva información de El Confidencial, medio que asegura que el letrado de la RFEF Ramón Caravaca reconoció que "recibió el encargo profesional del presidente de la RFEF" para investigar a David Aganzo, presidente de AFE, en una investigación interna del Colegio de Abogados de Madrid.
Aunque desde la Federación han emitido un comunicado negando tal acusación, desde la Asociación de Futbolistas Españoles han pedido la inmediata inhabilitación de Luis Rubiales. El sindicato afirma en su escrito que ha tenido acceso a la documentación "en el marco de una denuncia presentada ante la Comisión Deontológica del Colegio de Abogados de Madrid".
"AFE lamenta estos hechos abyectos que se alejan de la legalidad, y reprueba esta conducta que se podría tildar como mafiosa y no es propia de una federación deportiva. Por ello, exigimos la inmediata inhabilitación del presidente, Sr. Rubiales, por parte de los órganos competentes, ya que su dimisión es poco probable", añade.
El sindicato anuncia que "adoptará de inmediato las medidas oportunas en el ámbito judicial correspondiente ante las presuntas prácticas ilegales empleadas por la RFEF con su presidente a la cabeza como máximo responsable".
"Es evidente que el único fin de estas actuaciones era el de amedrentar, coaccionar y, sobre todo, entorpecer el buen y adecuado funcionamiento del sindicato de futbolistas. Una injerencia injustificable y que atenta directamente contra la libertad sindical", agrega.
AFE indica también que trasladará estos hechos al Consejo Superior de Deportes (CSD), la FIFA, la UEFA y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para que "se adopten las medidas oportunas", al entender que "esta situación rompe por completo el papel institucional" en el que deben moverse "los operadores del deporte en general y del deporte en particular".
"Este tipo de conductas perjudica claramente la imagen del fútbol español a nivel internacional, por lo que debe actuarse de inmediato y con contundencia con el fin de proteger el buen nombre y reputación de la RFEF y la viabilidad de la candidatura en la que está inmersa España para organizar la Copa del Mundo 2030 junto a Portugal y Marruecos", subraya AFE en su comunicado.
Como decíamos, antes de que la AFE se pronunciara, la Federación daba su versión de los hechos asegurando que el propio señor Caravaca rechaza la información publicada por El Confidencial. "Ramón Caravaca, declaró, ante la Comisión de Ética del Colegio de Abogados de Madrid y explicó que Juan Rubiales, por aquel entonces Jefe del Gabinete de la Presidencia de la RFEF, fue quien le presentó al cliente que quería denunciar irregularidades en AFE. El Instructor del procedimiento ha confundido al Sr. Juan Rubiales con el Sr. Luis Rubiales", recalcan desde la RFEF.